ROCA (AR).- La barrera impuesta por el Concejo Deliberante a un proyecto del Poder Ejecutivo de Roca, que pretendía declarar la emergencia hídrica en la ciudad, derivó en un fuerte cruce entre funcionarios justicialistas y ediles de la UCR.

El nudo del conflicto se produjo al momento de discutir una eventual autorización al intendente, Carlos Soria, para que en casos de urgencia realice compras de bienes necesarios en forma directa, más allá del costo de la inversión.

El radicalismo objetó el mecanismo pretendido para sumar facultades al mandatario y desde el gobierno local advirtieron la contradicción que significa exhibir esa postura al mismo tiempo que el Ejecutivo provincial -en manos de la UCR- contrató directamente y por más de 10 millones de pesos a la empresa encargada de refaccionar la alcaidía local.

Lo cierto es que sin apoyo del bloque radical, el PJ tuvo que conformarse con una resolución emitida el lunes en la que se expresó la preocupación por la situación que se vive a orillas del río Negro a causa de las crecidas. Respaldados por los informes que consideran que la etapa crítica ya fue superada, los ediles acordaron que el proyecto vuelva a discutirse dentro de un mes.

La voz oficial para criticar esta decisión fue la del director de Prensa, Julián Goinhex. El funcionario atribuyó la frustración del proyecto a la negativa de la UCR a sesionar la semana pasada "porque varios concejales estaban de viaje" y aseguró que la consencuencia de esta realidad será mantener "en un marco de ilegalidad" al municipio para el caso que deban comprarse productos para asistir a las familias afectadas por una inundación.

"Que los riesgos hayan disminuido no quiere decir que hayan desaparecido. Esperemos que no sea así, pero si aumentan los caudales de manera significativa el municipio no tendrá una herramienta legal para disponer de los fondos que harán falta", agregó el director de Prensa.

Ayer por la tarde el concejal Marcelo Marco (UCR) argumentó que "si un proyecto era bueno la semana pasada y hoy ya no sirve deja claro qué tan serio era. Las normas deben ser perdurables en el tiempo y por eso de acá a un mes se tratará un proyecto que contemple casos futuros, quitándole dramatismo a la cuestión".

El representante radical agregó que el debate del lunes también permitió inferir que ni los propios concejales del justicialismo estaban convencidos con la redacción realizada por el Ejecutivo.

En tanto, Marco mencionó otros aspectos controvertidos de la iniciativa, por caso el artículo que pretendía declarar "zona de desastre" al sector ribereño del ejido roquense.

"Al día de hoy los informes oficiales indican que el punto de crecida más alto ya se dio. Sacar una ordenanza de este tipo lo único que hace es generar más confusión a los vecinos", opinó el edil.