No hay dudas, Stuttgart le sienta bien a los argentinos. Ayer lo ratificaron con cinco triunfos, tres que hicieron mucho ruido. Más que ruido, hubo tango del mejor.

Juan Mónaco, Mariano Zabaleta y Juan Martín Del Potro debutaron con una victoria, mientras que David Hartfield y Diego Junqueria dieron dos batacazos.

Mónaco cerró el partido que se había suspendido el pasado lunes por falta de luz con el local Michel Berrer, al que superó por 4-6, 7-6 (8/6) y 6-4. Su próximo rival será el belga Kristof Vliegen.

Del Potro, una de las esperanzas argentinas, fue el primero en dar que hablar. Ganó su segundo partido del año en el circuito profesional y nada menos que ante el rumano Andrei Pavel, por 3-6, 6-2 y 6-2.

Ahora enfrentará a Juan Ignacio Chela, quien pasó directamente a segunda ronda.

Zabaleta volvió a ganar después de casi un año. La última había sido frente a Feliciano López en Kitzbühel, el 30 de julio de 2005. Ayer despachó al alemán Alexander Waske, por 6-3, 3-6 y 6-3, y deberá enfrentarse a Gastón Gaudio, el principal favorito del certamen, que debutará hoy.

El "Gato" Hartfield no para de bajar candidatos. En el debut despachó al checo Robin Vik. Ayer superó al español Nicolás Almagro, quien este año se consagró campeón en Valencia.

Fue por un duro 6-7 (2/7), 7-6 (7/1) y 7-5, y será la primera vez en su campaña que jugará octavos de final de un torneo de ATP. En esta instancia enfrentará al ecuatoriano Nicolás Lapenti, quien superó al francés Florent Serra, por 5-7, 7-6 y 6-2.

Junqueira tampoco se quedó atrás. Asombró en la jornada inicial, cuando eliminó al belga Cristophe Rochus. Y ayer no fue menos importante su triunfo, porque superó al italiano Filippo Volandri.

El argentino jugó en gran nivel, no le dio opciones a su rival y terminó ganando por un categórico 6-3 y 6-4, en lo que fue el triunfo más importante de su campaña. Lo que se dice, un día bien argentino.