CHOELE CHOEL (AVM).- Finalmente se pudo determinar que las llamadas extorsivas que habían recibido meses atrás vecinos de la localidad de Lamarque, habían sido realizadas desde la cárcel de Ezeiza.
Así lo determinó una investigación llevada a cabo por el fiscal, Miguel Flores.
Las llamadas tenían como objetivo sacar dinero o tarjetas telefónicas. En todos los casos los vecinos que sufrieron este accionar delictivo recibían llamadas de cobro revertido en las que se les mencionaba que tenían supuestamente un familiar secuestrado y que si pagaban lo liberaban.
Finalmente el arreglo se hacía por tarjetas telefónicas.
Así se les pedía que compraran tarjetas por un monto que en general rondaba los 300 pesos y cuyas claves los vecinos tenían que enviar vía telefónica, y luego destruir las tarjetas.
En total fueron cerca de media docena de personas las afectadas por esta modalidad delictiva.
Tras varios casos, desde la comisaría se alertó a que no se recibieran llamadas por cobro revertido; mientras que la fiscalía comenzó con una investigación, en la que el principal punto era tratar de determinar de donde provenían las llamadas.
Tras varios meses se pudo establecer que habían salido desde la cárcel de Ezeiza, pero aún no se pudo determinar con precisión quienes fueron los autores de las mismas.