MONTEVIDEO (Especial para "Río Negro", Fernando Nolé).- La ciudadanía uruguaya recibió con satisfacción pero con tono de gran mesura y conciliador el dictamen de la Corte Internacional de La Haya sobre el diferendo con Argentina por la instalación de plantas de pasta de celulosa en Fray Bentos.

A la vez, un vasto sector de la población coincidió en que la solución con Argentina debe concretarse trabajando en forma conjunta. A escasas horas de conocerse la resolución de La Haya, "Río Negro" realizó una recorrida por algunos barrios y calles de Montevideo. Allí pudo comprobar que los ciudadanos uruguayos no tomaron esa decisión favorable para su país como una revancha.

"Esperamos que a partir de esto los gobiernos se pongan de acuerdo y retomen las negociaciones. Creo que es el único camino posible", afirmó Ricardo Serra, taxista de Montevideo.

"Aquí siempre tenemos un sentimiento de hermandad con los argentinos, más allá del fútbol. Por eso esto debería ser un motivo para volver a tener un mejor diálogo", agregó.

En la misma línea, Gonzalo Alfonso, técnico informático, afirmó que "esto es importante para el Uruguay, pero no da lugar a tomarlo como si fuera la final de un Mundial, o algo de vida o muerte". Ese mismo profesional subrayó que "creo que de alguna forma debería buscarse el camino de una solución en consenso entre

los dos países, pero indudablemente, el peligro es lo que resuelvan los asambleístas de Entre Ríos". Y justamente,en ese punto, muchos uruguayos daban por descontado que el corte del puente internacional que une a Gualeguaychú con Fray Bentos se va a producir en algún momento.

"No hay peor cosa que el miedo. Y si la gente tiene miedo, indudablemente algo van hacer", aseguró Lourdes Castro, secretaria de una importante empresa comercial del Uruguay.