NEUQUEN (AN).- La preocupación de los vecinos de Plottier por la puesta en marcha de un megaproyecto turístico en esa localidad se acrecenta con la tala de cada árbol. Aseguran que de realizarse las obras pondrían en peligro ecosistemas naturales y cambiaría el perfil de la localidad ya que el predio cuenta con la misma superficie que todo el casco urbano de la ciudad.

Se trata del proyecto Club de Campo Los Canales, un emprendimiento urbanístico y turístico que demandará una inversión de 80 millones de pesos para sus 430 hectáreas de superficie. Comprende un hotel de cinco estrellas, canchas de golf, un campo de polo, un barrio cerrado y una villa para 3.000 empleados.

Grupos de vecinos ya hicieron sentir su descontento con la iniciativa en el Concejo Deliberante donde peticionaron que se realice el estudio de manera urgente. Uno de sus representantes es el licenciado y profesor de Geografía, Andrés Peressini, quien advirtió que "al no haberse realizado el estudio de impacto ambiental las tareas que hagan están poniendo en riesgo los ecosistemas ribereños que son únicos en el Alto Valle".

Explicó que a pocos metros de la zona que será destinada a la construcción de un hotel cinco estrellas y un shopping "hay una reserva de selva ribereña y un área de nidificación de aves".

La iniciativa fue aprobada por vía de excepción el 15 de diciembre pasado por el Deliberante, luego de una breve gestión encarada por el Ejecutivo, que demoró sólo 35 días en obtener el visto bueno para que este proyecto se edifique sobre un área protegida por el Plan Urbano Ambiental.

"Fue una aprobación demasiado rápida y ahora pese a que intimamos desde el Concejo para que se presente el estudio de impacto ambiental la empresa aún no lo hizo y ya hace un mes que comenzó con los trabajos", señaló la edil por Frente Alternativa Popular, Liliana Peralta.

"Hace un mes que nos contrataron para hacer el estudio y creemos que antes de diciembre lo vamos a tener terminado", aseguró el agrimensor Rubén Pueyo, a cargo del estudio.

Peressini comentó que desde el inicio de las obras "se desmontaron 10 hectáreas de manzanos, se arrojaron escombros sobre zonas bajas y se avanzó sobre la línea de ribera y áreas anegables que son del río".

Además en el extremo oeste del predio, un cerco perimetral de tres metros de altura se prolonga sobre la línea de costa, extendiéndose unos cuatro metros sobre el río. "Este es un espacio que es de todos. Le están quitando este derecho a los vecinos que usan esta zona", comentó Peressini.

Arremetió contra el Ejecutivo y los ediles que aprobaron el proyecto ya que aseguró que "una iniciativa de tal tamaño debería haber sido consultada a los vecinos porque va a cambiar el perfil de Plottier, generando una segregación dentro de la ciudad, haciendo prácticamente dos ciudades".