SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Juan Carlos Alvarez presentó su renuncia a la secretaría municipal de Obras Públicas en desacuerdo con decisiones del Ejecutivo que, a su juicio, "traspasaron un límite" y significaron "injerencias" en su área.

A la hora de aportar alguna precisión mayor, sólo confirmó que su disgusto remite en buena medida a la contratación del periodista Guillermo Olarán, quien de ser un crítico implacable de la gestión Icare pasó a cumplir una función específica en la secretaría de Gobierno, a las órdenes de su titular, Adolfo Fourés.

Durante casi dos años, Olarán difundió desde su periódico "La otra cara" supuestos casos de corrupción en la administración municipal. La compra de insumos y la política de tierras fueron algunos de sus blancos más frecuentes.

"No me parece bien que una persona que sistemáticamente estuvo hablando mal de mí termine como alguien de la más extrema confianza del intendente -sostuvo Alvarez-. Incluso después de que muchos en el mismo Ejecutivo me decían que lo denuncie (por calumnias), pero yo nunca lo hice porque no le encontré sentido".

El ahora ex funcionario transmitió su intención de renunciar hace ya varios días, pero Icare le habría pedido que "se calme y lo piense". Cuando vio que no había retroceso con las decisiones que consideró erradas, confirmó su renuncia.

Alvarez estuvo a cargo de Obras Públicas durante un año y medio, lapso en el cual el municipio multiplicó la inversión en esa área. En el actual ejercicio el presupuesto previsto para Obras Públicas es de 8 millones de pesos.

Consultado ayer por este diario, el ex colaborador de Icare aseguró que nada tuvieron que ver con la dimisión sus trámites de jubilación ni tampoco su pertenencia al Movimiento de Unidad y Participación, un partido vecinal que decidió competir por afuera del oficialismo en las futuras elecciones.

Dijo que desde su rol siempre eligió "privilegiar la gestión antes que la política". Y aunque reconoció que una cuota de esta última "es imprescindible" para trabajar en la función pública, decidió renunciar porque "hubo algunas cositas que traspasaron el límite".

Aseguró que su determinación "no es apresurada ni mucho menos" y que luego de plantear su disidencia a nivel interno entendió que "las cosas no avanzaban y quedarse era perder el tiempo".

Su lugar será ocupado provisoriamente por el subsecretario de Planeamiento, Raúl Ferrari. Aunque la suerte de este funcionario también está en entredicho porque llegó al gobierno junto con Alvarez.