RINCON DE LOS SAUCES (ARS).- Un fallido parto en el hospital de Rincón de los Sauces, inició una importante búsqueda de un bebé recién nacido, en un caso que hasta anoche estaba rodeado de misterio e incertidumbre.

El viernes pasado, una parturienta de nacionalidad boliviana, llegó a urgencias del hospital con una fuerte hemorragia uterina y aparentes síntomas de trabajo de parto.

Para sorpresa de los médicos que la atendieron, del vientre de la mujer sólo extrajeron la placenta, sin hallarse rastros del bebé y su cordón umbilical.

La parturienta habla poco el castellano y tiene fuertes modismos del dialecto quechua, por lo que entender qué había pasado con el nonato o recién nacido, fue un verdadero problema.

A los minutos de preguntar sobre dónde estaba el niño y según el relato de los profesionales, la mujer dijo que algo se le había caído saliendo de su casa.

Ante la inesperada respuesta, una ambulancia del nosocomio, llegó hasta la humilde vivienda, en busca del recién nacido.

Según informó el director del hospital, Gustavo Pérez, "en la vereda de la vivienda se encontró una gran mancha de sangre pero ningún rastro del niño y tampoco pudimos ingresar a la casa porque estaba cerrada", indicó.

Inmediatamente, se iniciaron las actuaciones legales y sanitarias de rigor para conocer el destino del feto, que ya había cumplido las cuarenta semanas de gestación, información que se desprende del estudio realizado a la placenta extraída en el hospital.

La Policía llego al lugar casi 24 horas después con la orden de allanamiento correspondiente.

El comisario Ramón Lecaro, indicó a "Río Negro", que "hallamos prendas con sangre dentro de la vivienda y manchas de sangre fuera de ésta", dijo.

Los uniformados encabezaron una minuciosa requisa por las bardas cercanas al barrio social, donde vive la mujer extranjera, sin señales del recién nacido.

Por su parte, Pérez señaló que, "pocos días antes de este hecho, esta misma persona llegó al nosocomio para realizarse el control prenatal como corresponde y el médico de guardia confirmó la normalidad de los latidos fe

tales", por lo que queda comprobado que en el cuerpo de la mujer estaba creciendo y a punto de nacer un bebé", sostuvo.

El médico que estuvo a cargo del estudio de rutina, tenía previsto prestar declaración testimonial ayer en la comisaría local.

Su testimonio y la ficha peri- natal, son fundamentales para el caso ya que comprueban el embarazo, junto a la placenta que también fue enviada para estudios necróticos.

Ayer se supo que los investigadores manejan cuatro posibles sucesos que pudieron terminar con la vida del pequeño o estar en poder de otras personas. La versión de la madre hasta ayer era la menos sostenida pero también considerada por la policía.

La mujer, permanece internada en un hospital de mayor complejidad de Neuquén capital, según se supo con custodia policial.