BUENOS AIRES (Télam).- Los investigadores judiciales del ataque a balazos ocurrido el jueves último en Belgrano, donde un hombre mató a un joven e hirió a otras seis personas, creen que el agresor no es un desequilibrado mental sino que quiso disparar contra alguien en particular y que las víctimas, ajenas al hecho, quedaron en la línea de fuego.

Sin embargo, los pesquisas policiales mantienen su hipótesis de que el agresor "es un loco" que "por algún motivo, aún desconocido", disparó once balazos con una pistola calibre 380 por la avenida Cabildo minutos antes de las 17 del jueves pasado, cuando decenas de personas transitaban por la zona.

Fuentes judiciales dijeron que en la causa no está determinado que el agresor sea un "loco" que disparó sin razón, por lo que trabajan intensamente sobre los estudios planimétricos realizados por los peritos. Es que los pesquisas consideran de sumo interés establecer cuál fue la secuencia de los disparos y dónde se hallaba cada una de las víctimas al momento de ser impactadas.

Las fuentes dijeron que se intenta determinar, entre otros puntos, si uno de los heridos, que según fuentes policiales tiene antecedentes penales, se hallaba cerca o en la misma línea que el joven de Necochea Alfredo Marcenac, quien murió al recibir dos balazos en el pecho y uno en la cabeza.

"Creemos que el agresor apuntó a otra persona en la cabeza y que Marcenac se cruzó en el medio. No es casual que este muchacho haya recibido los balazos en el pecho y en la cabeza y los otros en las extremidades", dijo un investigador.