Catriel (Joaquín Peralta- Enviado especial).- Cipolletti ratificó que es el ‘Capo de la Confluencia’. Ayer venció a Catriel por 1 a 0 como visitante y se consagró campeón de la Liga por cuarta vez consecutiva.
Este logro sólo registra un antecedente en la historia de la Confluencia y fue logrado también por Cipolletti entre los años 1983 y 1985.
El albinegro fue de menor a mayor y terminó justificando el título con un juego sólido en defensa, un mediocampo que dejó pocos huecos y una delantera muy efectiva.
De los últimos once partidos -incluidos semifinal y final-, ganó nueve y empató dos.
Otro dato que demuestra una superioridad sobre el resto es que de visitante se impuso en los últimos cinco:  Catriel, Argentinos del Norte, Círculo Italiano, Saltense y Atlético Regina.
Ayer se encontraron los dos mejores equipos del torneo, y si bien abundó la pierna fuerte por sobre el fútbol bien jugado -el arbitro sacó trece amarillas y una roja- el partido estuvo a la altura de una verdadera final.
Cipolletti casi anota en el inicio luego de un cabezazo de Fernando Rojas que capturó abajo Pablo Castillo y unos minutos después Diego Avila -de los mejores de la cancha- se lo perdió al tirar por arriba cuando el arquero ya estaba jugado.
Promediando la etapa Fernando Castro subió por derecha y mandó el centro pasado. Dómini no pudo en primera instancia, pero el rebote le quedó a Rojas que, entrando de frente, acomodó la pelota para darle la ventaja al albinegro.
Del local, mucha fuerza en la marca, pero poca claridad para atacar. La primera recién llegó a los 37 cuando pablo Peña vio el hueco y le pegó de afuera pero Ferreyra estaba atento.
En el segundo ‘Cipo’ perdió peso ofensivo con la salida de Henry Sáez, pero mostró solidez para aguantar al rival.
Catriel adelantó sus líneas pero utilizó los centros casi como única vía de ataque.
El reloj siguió corriendo y daba la sensación de que el resultado ya no cambiaría. Después fue todo festejo albinegro, que llegó al tetracampeonato.

Suplemento Podio