VIEDMA (AV)- Las sofisticadas camionetas cuatro por cuatro, todo un símbolo de estatus en el tiempo actual para los argentinos, no cuentan en Río Negro con una calificación especial al momento de facturarle el Impuesto a las Patentes. Así, reciben el mismo tratamiento que si se tratase de un vehículo de trabajo.
El único elemento que la legislación le permite a la Dirección General de Rentas actuar para aplicarle un gravamen superior, es el valor de mercado que puedan tener estos elegantes rodados.
Por caso, una BMW "Executive todo terreno", modelo 2005 que tiene un precio establecido de 143.800 pesos de acuerdo con las revistas especializadas, debe tributar al año un total de 5.033 pesos, las que se dividen en seis cuotas. Una situación similar ocurre con un Volvo 2006 cotizado en 228.000 pesos, cuya facturación anual es de 7.980 pesos a liquidar en seis bimestres.
Los cálculos impositivos tienen como basamento la Ley 4.019 que permite emplear una alícuota de 3,5% sobre la mencionada cotización, aunque allí también se encasillan minibuses para transporte de pasajeros, utilitarios y otros todo terreno que bien pueden ser empleados en tareas rurales.
En un segundo rango, con una alícuota de 2,5% sobre la valuación oficial, están registradas por el ente recaudador las conocidas doble cabina, tipo Toyota versión Hilux. A veces, se ven lejos del campo, aunque con los 93.700 pesos que valen, los propietarios tienen que pagar 2.342 pesos al año.
Razones oficiales
Algunas explicaciones oficiales dan cuenta que resulta difícil determinar mediante el sistema informático qué uso tienen las cuatro por cuatro porque se corre el riesgo de incurrir en un error. Posiblemente se utilicen en la ciudad pero en el mismo rango pueden estar afectadas a la producción, se indicó.
La Dirección de Rentas, tampoco cuenta en la actualidad con un soporte informático que le permita determinar -en esos rangos- qué grado de cumplimiento existe.
Incluso, el titular del organismo, Graciano Bracalente, buscó diferenciarse de las posibilidades de control que pueden tener otras jurisdicciones, como Buenos Aires, ya que de acuerdo con la densidad demográfica con que cuenta la vecina provincia, pareciera ser un país dentro de otro.
Las ventajas de Montoya
Según el funcionario rionegrino, su par Santiago Montoya, tiene a su alrededor un esquema de recaudación e infraestructura muy distintas y suele actuar mediante mecanismos "persuasivos de carácter mediático" sobre los deudores de ese tipo de vehículos.
Insistió en que tiene "tantos inspectores como la cantidad de empleados nuestros" que rondan los 300.
Mencionó que "nosotros nos manejamos con la figura del contribuyente cumplidor, que le otorga más beneficio a quien está al día, y la gente sabe que si está fuera del sistema (de pago) tiene más costo, sobre todo cuando más caro es el auto".
Bracalente puso como ejemplo en ese sentido, que la recaudación por patentes en la provincia -en general- tiene una importante efectivización, al estar en un 63%.
No obstante, desde el área se están barajando algunos mecanismos modificatorios en general que pasarían por actualizar bases de datos a fin de dinamizar la administración del impuesto a las patentes.
Para ello, está previsto que en agosto se concrete una reunión con los Registros de Propiedad del Automotor como las concesionarios automotrices con el objeto de promover un reempadronamiento.