BUENOS AIRES (ABA).- "Mire,doctor....hay cosas que se pueden decir...y hay otras..." Desde su lecho de enfermo, el ex senador Angel Pardo, con su mirada, trató de hacer entender algo al juez Daniel Rafecas que, acompañado de uno de sus secretarios, lo visitó en su domicilio de la capital federal.

Si bien el magistrado que entiende en la causa de las coimas quería una repuesta más explícita, Pardo se calló la boca.

Testigos de la escena dijeron a este diario que Pardo "algo se guarda".

"Yo soy una persona prestigiosa en Corrientes. Tengo amigos prestigiosos. Esto me ha hecho muy mal", declaró Pardo, quien a través de sus nuevos abogados pidió ampliar sus dichos en la causa por los sobornos.

Como no podía ir personalmente, le preguntaron al juez si tenía algún problema en desplazarse. El juez respondió que no y fue a verlo sin saber con que se iba a encontrar.

Lo de Pardo adquiere trascendencia después del "quiebre" de Remo Costanzo, que acorralado por las pruebas en su contra tuvo que admitir que la noche enla que el "arrepentido" Mario Pontaquarto dice haber llevado el dinero para el pago de las coimas, él estuvo en la casa de Emilio Cantarero, donde supuestamente se hizo "el reparto".

La confesión de Pardo indicando que su ex colega Alberto Tell "nunca había estado con él en La Biela esa famosa noche", abrió la esperanza de que se rompa el "pacto de silencio" entre los implicados.

Pardo señaló también que "no era cierto que el senador (Jorge) Yoma los había llevado en su auto a ambos hasta La Biela".

Indicó que estaba peleado con el riojano, actual embajador en México, y que nunca hubiera subido a su vehículo.

De esta manera, Pardo desarticuló la coartada de Tell, por entonces presidente de la estratégica Comisión de Trabajo, donde se dio luz ver al proyecto de ley de flexibilización laboral.Rafecas, se indicó a "Río Negro", sostiene que se va ratificando la exposición de Pontaquarto y se da crédito a las pericias telefónicas que ubican a los protagonistas de los sobornos, la noche del 26 de julio del2000, en la celda que corresponde al domicilio en esta capital de Cantarero,en Callao y Posadas.

Los fiscales, ahora, pedirían al juez el cierre de la etapa de pruebas y la elevación a juicio oral. Esto ocurriría antes de la feria judicial de invierno.

Después de ella, se decidiría que hacer con el ex presidente Fernando de la Rúa, a quien Rafecas está a punto de procesar, según dejaron trascender fuentes judiciales fidedignas.