VIEDMA (AV)- El bloque oficialista aceptó anoche la propuesta del gobernador Miguel Saiz para los nombramientos del Tribunal de Cuentas, otorgando a Pedro Casariego continuidad por otros seis años y designando a Daniel Bossero como reemplazante de Ruben Gianni.
Casi la totalidad de la oposición (exceptuando el peperreísta Claudio Lueiro y Francisco Castro, del partido Demócrata Progresista) rechazó estas propuestas, pero no fue suficiente ya que el oficialismo impuso su mayoría.
Concluida la votación, Gianni y Casariego juraron ante el legislador Jorge Pascual, quien presidió la sesión legislativa. Además, en la sesión se otorgó acuerdo a la designación de Gustavo Pichi como Contador General, en reemplazo de Bossero.
El Tribunal de Cuentas es el máximo órgano de control externo de la provincia y las designaciones de ayer tienen mandatos hasta el 2012.
Los debates giraron en relación a que el radicalismo acordó con otros partidos, en el marco de la reforma política, reglamentar la selección de los controladores para garantizar su independencia respecto del poder político, pero el gobernador Saiz sostuvo el viejo esquema de proponer a gente de su partido.
El oficialismo interpretó que esos cambios requerían una enmienda constitucional pero la oposición -según defendió Marta Borda- destacó que sólo se necesitaba una ley para reglamentar el esquema de selección y evaluación de la propuesta del gobernador.
El debate lo abrió el presidente de la bancada oficialista, Bautista Mendioroz, destacando que los candidatos conformaban propuestas del gobernador pero que los diputados radicales asumirían "la responsabilidad" y apoyarían unánimemente esas postulaciones.
Luego, la arista Magdalena Odarda defendió la reforma política pero entendió que la elección propuesta era "herirla de muerte" por su "manipulación". Dijo que era defraudar a quienes creyeron y que no existía todavía real di
mensión del costo. Enseguida, el justicialista Carlos Peralta reivindicó una "reforma integral" y manifestó que otra actitud habría sido "un ejemplo del gobernador", incorporando otros candidatos "idóneos y capaces".
Por Encuentro, Fabián Gatti diferenció su argumentación entre los antecedentes de los candidatos y el mecanismo utilizado. Destacó la estrecha relación de Casariego y de Bossero con el poder ya que siempre "tuvieron subordinación administrativa". Recordó además que Bossero fue "subsecretario en el Proceso de Reconstrucción Nacional" por lo que "no quería ser cómplice de un funcionario de la dictadura. No queremos -agregó- un Tribunal oficialista". Entendió que la reforma fue "una farsa" y "una joda" del gobierno de Saiz.
A su turno, la legisladora radical Ana Piccinini -que preside la comisión de Reforma Política- dedicó su introducción para cuestionar extensamente al diario "Río Negro". Entre otras calificaciones, la diputada dijo que este medio "mantuvo su línea y hábito dañoso", planteando "un manto de sospecha" hacia los miembros del oficialismo. Entre sus argumentos, se quejó por la no publicación de una nota suya de la reforma. Defendió su "libertad e independencia", la de sus pares y la de los candidatos para el Tribunal. Además, desestimó los reclamos y cuestionamientos de la oposición -especialmente de Encuentro y del PJ-, pues habían acordado que las modificaciones para los órganos de control eran posteriores. "No existe ningún acta con ese reclamo por esos cambios, pues la prioridad inicial era la reforma electoral", explicó.
Posteriormente, hablaron Celia Grafigna (MAD), Javier Iud (PJ), Mario Colonna (PJ), Oscar Machado (UCR) y cerró Mendioroz.
