NEUQUEN (AN).- La justicia condenó a dos años y medio de prisión en suspenso, e inhabilitación absoluta y perpetua para ocupar cargos públicos, a la falsa médica Mónica Andrea Castañón. La acusó de fraguar el título y de firmar 131 certificados médicos en los dos años que trabajó para la Policía.

La sentencia fue dictada por el juez correccional Alejandro Cabral luego de un juicio abreviado en el que la acusada reconoció su culpabilidad. Una copia del fallo fue entregada a "Río Negro" por la oficina de prensa del Tribunal Superior de Justicia.

De acuerdo con la acusación del fiscal adjunto Andrés Carrea, Castañón (39 años) logró "inducir a engaño a la administración pública provincial" mediante la presentación de fotocopias de cursos y títulos, "haciéndole creer que era médica". De esta manera "logró su designación en planta permanente, categoría HS-2" con un sueldo promedio mensual de 500 pesos que percibió entre junio de 2003 y abril de 2005.

También la acusó de "haber ejercido actos propios de la profesión de médica sin poseer el título para ello en oportunidad de desempeñar su cargo en la Policía provincial". Algunos de esos actos fueron "diagnosticar dolencias de internos de la Unidad 11". También certificó algunos casos de muerte natural, lo cual provocó trastornos y nulidades en causas judiciales. Según la investigación, la falsa médica firmó en total 131 certificados hasta que la descubrieron.

La tercera acusación que le imputó el fiscal fue "haber hecho fabricar dos sellos como pertenecientes a la Subsecretaría de Salud de la provincia y de la directora de fiscalización de esa dependencia, destinados a certificar la inscripción de un profesional médico en la matrícula provincial correspondiente". Esos sellos fueron encontrados durante el allanamiento a su vivienda.

Para Carrea, la imputada cometió los delitos de "fraude en perjuicio de la administración pública, en concurso real con usurpación de título reiterado, 131 hechos, en concurso real con falsificación de sellos en carácter de coautora".

Por todo ello pidió que la condenen a tres años de prisión en suspenso e inhabilitación especial perpetua para ocupar cargos públicos.

La defensora Laura Cancela admitió que Castañón es culpable, pero consideró que por su falta de antecedentes y su arrepentimiento, la pena solicitada por el fiscal era excesiva. Propuso que la condenen a 2 años de

prisión en suspenso y que no la inhabiliten para ejercer cargos públicos porque "los hechos tuvieron lugar para ingresar a la administración pública, y por lo tanto no era funcionaria al cometerlos".

El juez Cabral entendió justo aplicarle dos años y seis meses de prisión en suspenso. En cuanto a la inhabilitación especial y perpetua para ocupar cargos públicos, señaló que sí corresponde aplicarla "toda vez que la imputada, una vez nombrada en la administración pública, estuvo ejerciendo actos propios de la medicina y cobrando un sueldo durante casi dos años".

El caso de la falsa médica trascendió públicamente a mediados del año pasado y provocó un fuerte sacudón interno en la Policía.

Es que para la misma época trascendió que varios jóvenes habían ingresado a la institución falsificando sus títulos de estudios secundarios.

Lo que nunca se informó es quién fue el responsable de permitir su ingreso a la institución policial.