ROCA (AR).- Todo hace pensar que el intendente Carlos Soria tendrá que desistir de su idea de municipalizar la Casa de la Cultura.
El coordinador de la institución, Andrés Fuhr -quien estaba visiblemente molesto porque Soria primero salió a hablar con los medios antes de presentar el proyecto ante la Comisión Directiva- se vio respaldado por los anuncios hechos por el gobernador de la provincia, Miguel Saiz, durante la mañana de ayer.
En un breve discurso, Saiz afirmó que "desde el gobierno vamos a defender con uñas y dientes" a la Casa de la Cultura y prometió una "partida importante" en el presupuesto del 2007 "para que podamos empezar a cumplir con una vieja deuda, que es la Sala 1".
Durante el acto donde se hizo entrega de los 33 mil pesos en concepto de subsidio destinados a la instalación del nuevo sistema de calefacción, el gobernador arrancó los aplausos de la au
diencia al manifestar que la Casa de la Cultura "siempre fue conducida y manejada por los civiles" y que, desde la provincia, seguirán defendiendo esa independencia y autonomía.
"Lo haremos para que en este ámbito se exprese la cultura como cada uno de los integrantes de la institución quiere que se exprese sin seguir instrucciones ni mandatos de ningún iluminado que pretenda orientarlo en uno o en otro sentido", dijo Saiz haciendo una clara referencia al intendente.
Por su parte, Fuhr sostuvo que tiene planificada una reunión con gente del municipio recién para la semana que viene donde por primera vez se hará la propuesta oficial a la Comisión Directiva.
Al respecto, el coordinador de la institución explicó que a ellos le corresponde escuchar la propuesta por "respeto a la investidura del intendente" aunque deslizó que es Soria el que a veces "no está a la altura de su investidura".
Además, manifestó que la situación de la Casa de la Cultura no es tan grave como la describen desde el municipio. "Lo que intentan hacer ver es absolutamente falso" y al respecto explicó que está conforme con su gestión porque pudieron superar situaciones que supusieron un importante desembolso de fondos que fueron aportados por la provincia "sin ningún tipo de pedido a cambio, sin obligarnos a firmar ningún convenio para sacar ventaja o que ponga en peligro la independencia de la casa". Por ello, no están dispuestos a aceptar ninguna "ayuda que suponga una contraprestación a cambio".
Fuhr recalcó que "la Casa de Cultura no es de la ciudad, es de los socios" aunque las decisiones que tomen lo hagan "pensando en la ciudad".
Actualmente la institución está "en el mejor momento" en cuanto a proyecto educativo ofreciendo talleres donde concurren cerca de 300 alumnos y tienen una cartelera de espectáculos que "en un mes supera a la propuesta por el municipio en un año", señaló Fuhr para reafirmar que "no hay por qué cambiar de rumbo".