ALLEN (AA).- Una vivienda ubicada en pleno centro de esta ciudad, propiedad de un empresario frutícola, fue asaltada luego de que una empleada fuera engañada por tres delincuentes. La banda montó un ardid frente a la casa y, tras reducir a la mujer en forma sumamente violenta, lograron ingresar y llevarse una importante cantidad de dinero en efectivo, además de otros elementos.

Según informaron fuentes policiales, el hecho ocurrió en la mañana del lunes en un domicilio ubicado a pocos metros de Avenida Roca, sobre el paseo del bulevar.

Todo se originó cuando una mujer de unos 40 años tocó el timbre de la vivienda con el pretexto de entregar una planta que sería de la dueña de la casa, una funcionaria de la municipalidad de Allen. La mujer la atendió y quiso recibir la entrega pero aquella dijo que antes tenía que firmarle una nota para constar que había recibido la planta, aunque no tenía una lapicera. Por esa razón, la empleada le habría permitido ingresar y en un descuido, ese momento fue aprovechado por dos malvivientes que irrumpieron en el hogar violentamente y le asestaron un fuerte golpe por la espalda a la mujer, de más de 50 años.

Esta cayó al suelo, desvanecida y los ladrones igualmente la ataron de pies y manos con alambres y después la llevaron a un baño, donde la dejaron encerrada. Luego se dedicaron a revolver tranquilamente cada una de las dependencias de la propiedad en busca de dinero.

Trascendió que los asaltantes se habrían alzado con una importante cantidad de efectivo que tenía el empresario frutícola, además de otras pertenencias, aunque no se brindó mayor información sobre el monto sustraído.

Una vez alcanzado su propósito, los delincuentes huyeron sin levantar sospechas en el vecindario, y dejando a su víctima encerrada en el baño de la vivienda.

E grave hecho recién fue advertido unas dos horas más tarde por el dueño de casa, quien se encontró con su domicilio totalmente revuelto y debió ayudar a su empleada, presa de un aún de un gran susto y muchos nervios por el dramático momento que le tocó vivir.

En forma inmediata se dio aviso a la policía -en el hecho intervino la Comisaría Sexta y el fiscal en Comisaría local- y se realizó un operativo por el sector, pero hasta ayer no hubo novedades sobre los asaltantes ni tampoco sobre el botín sustraído.

Se inició una causa judicial con intervención del Juzgado 12 de Roca.