La ayuda de Jordania, que juró vengarse de su súbdito Abu Musab Al Zarqawi, jefe en Irak de la red terrorista Al Qaeda que también tenía como objetivo a su país de origen, fue clave en la operación que permitió su muerte cerca de Bagdad.
Zarqawi murió a causa de sus heridas "diez minutos después de la operación". Presidía una reunión de "su grupo terrorista" en el momento de la operación, según la fuente. Inmediatamente después de su muerte, las fotos más recientes en poder de las autoridades norteamericanas y jordanas fueron comparadas con las del cadáver, lo que permitió confirmar la identidad de Zarqawi.
La detención el mes pasado en Jordania de un lugarteniente de la rama iraquí de Al Qaeda, el iraquí Ziad Jalaf Al Karbuli, fue crucial para la eliminación de Zarqawi, explicó la fuente.
"Las información que dio Karbuli a los investigadores jordanos permitieron el éxito de la operación del miércoles en Baaquba", afirmó. El alto responsable jordano dijo además que Jordania "fracasó en varias operaciones terroristas contra países amigos", aunque no facilitó detalles sobre estas operaciones ni sobre los países.
También informaciones procedentes del círculo del jefe de Al Qaeda en Irak, permitieron a las fuerzas norteamericanas localizarlo y "hacer justicia", informaron fuentes norteamericanas.
Las fuerzas estadounidenses se habían acercado, desde hacía seis semanas, al líder de Al Qaeda en Irak, explicó ayer el general William Caldwell, portavoz de la fuerza multinacional en Irak.