Ya varios medios hicieron eco del desembarco de Francis Ford Cóppola en nuestra Patagonia para el rodaje de "TETRO", su último proyecto. Pero se me ocurrió que a lo mejor mucha gente identifica a Cóppola como una leyenda, pero no dimensiona por qué.

Obviamente aquí hablamos de cine, pero actualmente "FFC" es un apasionado por los vinos, un productor cinamatográfico y dueño de una cadena hotelera y otra de Cafes. Un verdadero empresario multifasético que cambió la mirada cultural que tenemos de un mafioso italiano.

El cine es una ventana hacia la cultura de los pueblos. Es un espacio de difusión del sentimiento de un artista con la posibilidad de ser difundido por muchos medios. Y Cóppola no sólo entiende esto, sino que además debe ser conciente del impacto cultural mundial que tienen algunas de sus películas. Claro que algunos cinéfilos me dirán que las más interesantes obras de FFC seguramente son las menos vistas y más personales para él. ¿Pero a esta altura qué cinéfilo que se jacte de serlo puede decir que no recuerda al Don Corleone del inolvidable Brando?. Para empezar bien arriba, a FFC lo hizo leyenda indudablemente la saga de "El Padrino", "Apocalipsis Now" y su versión de "Drácula". Pero entre sus obras hasta se dió el gusto de tener una hija que nos regalaría "Perdidos en Tokio" entre otras.

Pero no todas son rosas en la vida de FFC. De hecho en varios momentos de su vida no la pasó nada bien y hasta filmó películas olvidables para hacerse camino en el cine. Comenzó en la década del 60 con mediometrajes con desnudos para ejercitar el lenguaje y, de paso, llamar la atención. Luego tuvo como mentor a Roger Corman y lo asistía en sus aventuras de terror y sangre en la gran pantalla. Antes de pelearse con Corman dirige sus propias películas de terror para luego pasar al musical. Pero es recién con "La gente de la lluvia" que gana la Concha de oro en el Festival de San sebastián y arma Zeotrope con George Lucas para comenzar así su carrera definitiva como director reconocido.

Ya en los comienzos de la década del 70 se embarca con el mismísimo Mario Puzo a adaptar el guión de la novela "El Padrino", y aunque por momentos el estudio pensó en despedirlo y cambiarlos por un director de más FX y tiros, demostró al mundo que estaba para las grandes ligas. Hablar de esta película merecería un post aparte. Brando, Pacino y el majestuoso montaje de Cóppola, hacen de esta película no sólo una película de culto, sino también una obra de arte.

Luego llegaría el caótico rodaje de otra pieza que quedaría para la historia. "Apocalipsis Now", con infarto de su protagonista incluído durante el rodaje, enfermedades varias, tormentas que se llevavan los decorados, Filipinos que se llevaban los helicópteros del rodaje para ir a batallar y una larga lista de etc. que no hicieron más que darle mayor mística a una película inolvidable.

Luego, en los 80 vendría la ruina económica y los trabajos por encargo para salir a flote. Hasta que accede a realizar una nueva obra maestra y recuperar el éxito y la fama con "El padrino 3".

Y después, el mejor Drácula de la historia del cine (gusto personal y subjetivo). Un Gary Oldman irreconocible para una obra intrigante y majestuosa. No debe ser fácil ponerse al frente de una historia tan revisitada y hasta mofada por el cine. Pero FFC le dió un nuevo sentido e hizo que las nuevas generaciones conocieran a otro Drácula.

Vinieron películas más o menos recordables, pero ninguna como estas tres joyas (5 si contamos que "El Padrino" tiene 3 entregas).

Hoy, el tipo que construyó un nuevo imaginario cinéfilo y fuertes paradigmas de personajes hasta entonces casi caricaturizados, dirige su lente a actores con fondos patagónicos. No es una noticia menor, que una leyenda mundial cinéfila pase por nuestras tierras. Espero que sirva para dimensionar la importancia de contar con un artista de esta talla entre nosotros. Y que dentro de su inspiración, contemos con decorados nuestros.