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06 » Jun 2008 |
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ALCIRA ARGUMEDO, la Universidad hoy |
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La socióloga e investigadora del CONICET, Alcira Argumedo, afirmó que el sistema universitario está todavía contaminado por el pensamiento neoliberal de los 90 y que se debe un debate para saber hacia dónde se dirige y retomar el pensamiento de los reformistas de 1918.
P. ¿Cuáles fueron los factores sociales que hicieron posible la reforma universitaria de 1918?
R. El fenómeno hay que buscarlo primero en el crecimiento poblacional evidenciado en las clases medias, quienes eran los hijos de los inmigrantes de 1880. La universidad que existía en ese momento era una universidad jerárquica, enclaustrada y cerrada sobre sí misma, muy elitista y vinculada a lo religioso, la mayoría de los alumnos pertenecían a las clases acomodadas. En Argentina se vivía bajo los efectos de la ley 1420 que extendió la educación y las clases medias presionan por la democratización y la apertura de la universidad, ya que el espíritu de la época estaba conmocionado por los aires reformistas que había en distintas partes del mundo.
P. ¿ Qué corriente de pensamiento predominaba entre los reformistas?
R. Los reformistas buscaban pensar la Argentina y América Latina desde ideas propias sin copiarse de modelos extranjeros, la mayoría de los reformistas eran radicales irigoyenistas aunque había partidarios del socialismo que representaban la demandas populares de aquella época, las cuales eran la base social del gobierno de Yrigoyen. La reforma del 18 es el primer movimiento masivo que busca reivindicar a América Latina con sus características y rasgos distintivos, ya que hasta ese momento sólo había esfuerzos individuales, como el de Jose Martí en Cuba.
P. ¿Qué pasó con la universidad luego de la reforma?
R. Los principios de la reforma universitaria como autonomía, libertad de cátedra, cogobierno, acceso sin cupos e irrestricto y laicisismo continuaron vigentes, pero con el ascenso de los sectores alvearistas al poder y en los años posteriores la universidad se volvió mucho mas academicista, por lo que otro aspecto de la reforma que fue la extensión, es decir que la universidad se abra hacia la sociedad, quedó de lado.
P. ¿Qué consecuencia trajo esto para la sociedad y para el propio sistema?
R. La consecuencia fundamental es que se volvió mas profesional, la universidad pasó a ser más que un centro de pensamiento crítico un lugar que permitía el ascenso social, por eso las carreras que más elegía la gente eran Derecho y Medicina, aunque se mantuvieron los principios que rodearon a la reforma como el ingreso irrestricto, sin cupos, que en muchos países todavía este tema no está del todo resuelto. De todas formas, el nivel académico era excelente hasta que "la noche de los bastones largos", en 1966, le aplicó un duro golpe a la universidad.
P. ¿Cómo evalúa la situación de la universidad en la actualidad?
R. Después de la dictadura militar, otro golpe que recibió la universidad fue la hegemonía neoliberal de los 90, que moldeó el sistema y fijó sus reglas de pensamiento. Se basaba en la hiperespecialización, la segmentación y la crítica a los trabajos que tuvieran una visión integral y relacional, se promocionaba la publicación de artículos más que de libros y en la rama de las ciencias duras hubo una dependencia absoluta con los países centrales. En la actualidad sigue existiendo ese pensamiento en el sistema universitario que regala capital intelectual al extranjero.
P. ¿Qué tan lejos se está de retomar los principios de los reformistas de 1918?
R. Hay que entender que con una universidad sin compromiso social, la sociedad esta condenada a una regresividad histórica, el nuevo gran recurso de los países es el conocimiento y es en la universidad donde se logra la reconversión de la mano de obra, por eso el sistema se debe este gran debate: establecer qué modelo de universidad se necesita y para qué modelo de sociedad, ya que esto no está claro. En los 90, el pensamiento neoliberal sabía qué modelo quería e hizo todo para lograr ese objetivo.
P. ¿Cómo piensa este debate en una universidad frente a la llegada de las nuevas tecnologías y la globalización?
R. No hay que confundir. Las máquinas no van a cambiar las cabezas de los hombres. Las máquinas pueden favorecer el proceso de aprendizaje, pero la escritura seguirá siendo patrimonio de los hombres. En la actualidad cambió el concepto de conocimiento, la universidad se hiperespecializó y se segmentó. Hoy un ingeniero no sabe nada de Economía y hoy las empresas prefieren contratar antes que un doctor en Administración de Harvard a un filósofo o historiador. Para establecer este debate es clave la nueva Ley de Educación Superior aunque la discusión llegue un poco tarde.
(Télam) |
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Categoría : ENTREVISTAS |  Comentarios [1]
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  Un saludo |
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Por : Mónica | 15 » Jun 2008 | 03:09 pm | Email
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Estimado profesor: Que bueno es leerlo después de tantos años sin saber de usted. Desde Comodoro Rivadavia un saludo. |
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