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Por Laura Hojman, de la agencia DyN
Alumnos del nivel medio de Argentina, Chile y Brasil reclamaron "más diálogo" con sus docentes, "participación en centros de estudiantes" y "cumplimiento de los días de clases", entre otras demandas, durante el Seminario Internacional de Educación Secundaria que cerró hoy Unicef en Capital Federal.
"La escuela tiene que formarnos al servicio de la sociedad", dijo uno de los estudiantes, quien abogó además para que se aumenten "proyectos comunitarios en los que se pongan en práctica los derechos humanos que se enseñan en las aulas". Los estudiantes argentinos Juan, Julieta y Angeles, de Buenos Aires, Jimena de Jujuy, Mario de Chaco y Daniel, Aldana, Silvia, Sonia y Andrea de Formosa, junto a los chilenos Ariel, Héctor y Gonzalo, y los brasileños Nicolás, Joao, Amanda, Lucas, Cinthia, Pingo y Priscila, participaron del Seminario Internacional en una entrevista abierta.
El diálogo fue moderado por los oficiales de Educación de Unicef Argentina, Elena Duro, y de Adolescencia de Brasil, Mario Volpi.
"¿Qué es lo mejor que tienen en la escuela secundaria a la que asisten?", preguntó Duro, y Ariel respondió: "El centro de estudiantes, porque es la representación de todos los alumnos" y era "un espacio importante de participación dentro del colegio".
Para Mario lo mejor son "los profesores, porque tienen una manera especial de enseñar, son muy cálidos" y Lucas coincidió también porque, dijo, "nos contienen".
Julieta y Aldana destacaron que en su colegio los maestros organizan talleres para reforzar los contenidos, mientras Amanda destacó que "lo mejor es que en mi escuela se trabajan las disciplinas asociadas a la realidad" y se "aprende matemáticas haciendo cálculos agrarios y es muy útil porque estamos en una zona rural".
"Lo mejor es un taller en el que se rescata la sabiduría ancestral que nos dejaron nuestros antepasados mapuches", continuó Héctor, quien estudia en una localidad de población indígena.
A la pregunta de Duro acerca de "lo que no les gustaba de la escuela secundaria", y pese a vivir en regiones diferentes, los estudiantes manifestaron muchas coincidencias.
Algunos destacaron el vínculo con sus docentes a la hora de buscar "lo mejor" en el ámbito escolar, otros señalaron "falta diálogo y de compromiso por parte de los adultos" y entre las principales falencias subrayaron la carencia "de infraestructura y de laboratorios de informática" y la "pérdida de días de clase".
Gonzalo, de Chile, advirtió que en su colegio hay cierta actitud "represiva" de parte de los directivos en contra del centro de estudiantes, "a partir de la protesta" que protagonizaron los secundarios de su país, conocida como el "movimiento de los pingüinos", en 2006.
"Esa protesta fue porque los estudiantes queremos una educación igualitaria, equitativa, con respeto por las culturas originarias", subrayó Héctor, y pidió a la audiencia que no se use más la palabra "alumno", ya que "en francés significa no iluminado".
Con similitudes con la educación argentina, el brasileño Nicolás sostuvo que el problema en la escuela media son "los días perdidos de clase" y dijo que "no veía mal" que los docentes protesten por un aumento salarial, aunque "nunca se cumple con los 180 días" lectivos.
Los brasileños también pidieron "adecuada infraestructura escolar y laboratorios de química e informática".
El Seminario Internacional de Educación fue inaugurado el martes por el director regional de Unicef para América Latina y el Caribe, Nils Kastberg, y las directivas en Argentina, Gladys Acosta Vargas, y en Brasil, Marie Pierre Poirier. También participaron los ministros de Educación de Argentina, Juan Carlos Tedesco, y de Chile, Mónica Jiménez, y la secretaria de Educación Básica de Brasil, María do Pilar Maceda. |
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