| |
31 » Mar 2009 |
 |
EL DILEMA DEL ASCENSO PARA EL ALBINEGRO |
|
| |
Cipolletti está en un lugar de privilegio en el Argentino A y nadie duda que la clasificación a la fase decisiva está asegurada (le quedan cuatro partidos de local de los cinco que restan). Será en la instancia caliente donde el equipo de Domingo Perilli deberá espantar algunos fantasmas camino al sueño del ascenso.
"Mingo" jura que no hay temores ni historias pasadas dando vuelta en las cabezas de sus jugadores. Que los malogrados "intentos" (suena demasiado pretensioso) de subir a la B Nacional "quedaron archivados" en el pasado y que "estos muchachos pueden hacer historia".
El técnico elogia a su equipo y en muchos aspectos hasta se queda corto. Porque Cipolletti se maneja con uno de los presupuestos más auteros de la categoría, tiene un plantel ciento por ciento regional y apenas sumó a dos refuerzos (de la zona, Pablo Costi y Orlando Porra, ambos venían de jugar en categorías inferiores). Quizá la mayor virtud del albinegro esté en haber consolidado un proyecto de largo aliento, que de alguna forma comenzó con el gerenciamiento y se extendió en el tiempo con la gestión Arriaga.
El equipo, desde ya, no tiene deudas pendientes porque hoy es el mejor de la categoría frente a conjuntos con billeteras bien gordas y lánguidas estadísticas comparadas con las de "Cipo".
Perilli y su cuerpo técnico podrían haber si algo más enérgicos para aplicar sanciones internas, pero ese es el único reproche para hacerles. Sí hay que decir que ni siquiera la gran campaña ha logrado prender en el hincha, un fenómeno que parece exceder al elevado precio de las entradas. "Este proyecto no lo vendieron bien, la dirigencia no sabe vender este equipo", analizaron hace un tiempo desde el seno del plantel. Hay algo de todo un poco.
La pregunta de aquí en más es qué sucederá si el albinegro se queda otra vez en las puertas del ascenso, como le ocurrió en la temporada pasada cuando en el hexagonal final quedó a un punto de Atlético Tucumán, o hace algunos años a manos del poderoso Racing cordobés. "Estamos en un momento bárbaro y no nos presionan estos antecedentes. Lo que hicimos es brillante, aunque la gente muchas veces no vea al enorme sacrificio y compromiso que ponen estos muchachos", recuerda Perilli.
-Se entiende que el objetivo es ascender, pero ¿qué pasará si no se consigue?
-No pensamos en eso. La gente debe entender que sólo uno de 25 equipos asciende y que no puede pensarse que salir tercero o cuarto es fracasar. No nos presionamos con eso, a los muchachos siempre les digo que sean buenos profesionales, que lo demás es secundario.
-Suena romántico, pero no es tan así, vos tambien querés ganar.
-Ya lo se, pero hay que entender que los éxitos son efímeros en el fútbol. Ascendamos o no, no vamos a quedar en deuda con nadie. La alegría de la gente tiene que venir por otro lado. Esto es un espectáculo, un juego, porque acá ascendés y al otro día la gente se sigue cagando de hambre. Es muy subjetivo todo...
-Hace un tiempo dijiste que Cipolletti no estaba preparada para ascender desde lo organizacional.
-Mirá, subir de categoría te da más prestigio y es un beneficio para todos. Pero a la vez ésto no lo podemos tomar como una mochila, hay que mantener la calma y darle valor a lo que se hizo hasta aquí. No hay equipos que se prepararon para ascender, que invirtieron mucha plata, y que están a cuatro puntos de la promoción (S.B). |
|
|
|
Categoría : Varios |  Comentarios[5]
|
| |
 |
| |
26 » Mar 2009 |
|
EL FÚTBOL MANOSEADO |
|
| |
En el fútbol argentino no se respeta absolutamente nada. La forma en que se "manosea" a Miguel Ángel Russo refleja la decadencia de un mundillo que se jacta de defender los benditos códigos pero que vive pisoteándolos.
Russo, aunque algunos lo hayan olvidado, es el mismo técnico campeón de la Libertadores 2007 con Boca y que hace apenas cinco meses fue firme candidato para ocupar el puesto que hoy es propiedad de Diego Maradona. Su estrepitosa "caída" es sólo entendible en un fútbol esquizofrénico como el de aquí.
"No es lindo todo esto, seguro, pero lo más importante acá es que tengo el apoyo de los jugadores", tiró el todavía entrenador de San Lorenzo después de saber que Marcelo Tinelli (y su grupo empresario) y la dirigencia "santa" habían decidido mantenerlo en el cargo. Russo, sin decirlo, dejó en claro que estaba cansado del manoseo. Pero ojo, el mismo técnico tiene culpa de ello, sobre todo por no tomar distancia con el periodismo-show porteño. Se dejó enredar y lo pagó caro.
Los canales de tevé y las radios porteñas, más las que tienen vinculación con el conductor "Bailando por un sueño", elucubraron decenas de hipótesis, conspiraciones y certezas de despido. Lo preocupante es que a esta altura todo parece demasiado normal, incluso que el mismo Tinelli, sin nungún cargo en la CD, tengo (o parezca tener) más poder de decisión que el presidente Rafael Savino. Russo sí manifestó algo entre líneas. La traducción de la frase antes citada sería "acá los jugadores no me van a voltear, como pasó en otros clubes". Algo que sucede mucho en estos tiempos, y que seguramente tuvo que ver con las seis renuncias de técnicos en las primeras siete fechas del torneo local.
En Banfield Jorge Burruchaga no se dejó manejar y prefirió dar un portazo antes que permitir las irrespetuosas intromisiones del presidente Porrel. Unas horas después (no más de 18) Julio César Falcioni ya había solucionado sus diferencias con el polémico titular, al que alguna vez trató de "loco", y se transformaba otra vez en DT del "Taladro". ¿Lo tenía arreglado de antemano? Todo hace pensar que sí.
El hilo se corta por lo más fino y los entrenadores son la variable de ajuste. Algo que ellos mismo saben y que también usan los dirigentes y jugadores para presionarlos. Muchas veces son los técnicos los culpables de sus propios males. Pero lo peor de todo, y que se impone, es que mientras las conversaciones privadas sigan siendo mediáticas, la confianza en el fútbol será tan difícil de conseguir como un técnico que dure una temporada (S.B). |
|
|
|
Categoría : Qué es de la vida de... | Comentarios[0]
|
| |
|
| |
18 » Mar 2009 |
|
EL GOBIERNO, EL FÚTBOL Y UN RIVAL PELIGROSO |
|
| |
El gobierno nacional parece dispuesto a intervenir de lleno en el fútbol y sus conflictos. Por un lado, es inminente la firma de un convenio con la AFA para que el derecho de admisión pase a ser directamente ingerencia estatal. Mientras que, por otro lado, la presidenta Cristian Fernández presentó hoy lo que será la nueva ley de Radiodifusión, que entre otras cosas buscará regular el negocio de la televisación de los partidos.
Mientras los barras de Boca disputan a sangre y fuego un botín de decenas de miles de dólares y salen por los medios amenazándose de muerte, el ministro de Seguridad y Justicia, Aníbal Fernández, criticó a la dirigencia del fútbol, dijo en forma tácita que había connivencia con los violentos en muchos clubes y defendió a la policía, lógicamente bajo su órbita.
Pero el transcurrir de las horas no hacen más que desmentirlos. Por un lado, porque está más que probado que Rafael Di Zeo, beneficiado ya con salidas transitorias, y el "Uruguayo" Richard no sólo tienen acuerdos con los dirigentes deportivos, si no que en más de una oportunidad trabajaron como material de choque para funcionarios del oficialismo. Además, también comenzó a ser público que Mauro Martín, el actual jefe de La Doce, juntará votos para el peronismo disidente en las próximas elecciones.
Algo que no es nuevo, pero no deja de sorprender por el nivel de impunidad con el que se produjo, ocurrió el martes en el sindicato de la Carne. Hugo Rodríguez(mano derecha de Di Zeo) y el "Ninja" Enrique (lacayo del "Uriguayo" Richard) pelearon por tevé espalda con espalda para defender el gremio que conduce José Fantini, apéndice de Hugo Moyano y por lo tanto sindicalista K. Enfrente se las vieron con gente del gastronómico Luis Barrionuevo, el ex titular de Chacarita (aquel que llamo a dejar de robar por dos años) que le hizo un corte de manga al ex presidente al negar la alianza que conformaron (con Ramón Saadi) para vencer al cobista Eduardo Brizuela del Moral en las legislativas de Catamarca.
Cómo olvidar que la esposa del mismo Di Zeo ocupa un importante cargo en la subecretaría de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, los disparos de "Madona" Quiróz, ex barra de Estudiantes, durante el traslado de los restos de Perón a la Quinta de San Vicente o el protagonismo de barras de Chacarita en la intervención del Hospital Francés.
Aquí la violencia no se termina con el registro de barras y con el derecho de admisión, como cree Aníbal Fernández. Tampoco aumentando el precio de las entradas, como muchos creen haciendo un lineal paralelismo con la erradicación de los Hoolingans de las canchas inglesas. Los hooligans eran marginales los domingos y sólo ese día se embriagaban y provocaban destrozos. Los lunes, como cualquier mortal, se colocaban la corbata y se iban al trabajo. Aquí no es así y los barras se matan por el dinero de los clubes y de la política, por los 40 mil pesos que deja el estacionamiento en La Bombonera y por saber quién apretará a los jugadores y dirigentes para conseguir el dinero para viajar a Sudáfrica 2010.
Aníbal Fernández se equivocó al defender a la misma policía que protege a La Doce y no iniciar una investigación, porque ya hay certeza de que hubo efectivos de que liberaron la zona en la batalla del domingo en Parque Lezama.
El intervencionismo del Estado en el fútbol y su negocio deberá ser más sincero, porque aunque suenen a gloria los lineamientos generales del proyecto para cambiar la ley de Radiodifusión (achicar la cantidad de licencias en una sola mano, intervención estatal en las transmisiones de los partidos, abrir el juego en la televisión por cable), también es menester recordar que en el fondo hay una lucha intestina con el grupo Clarín, dueño de los derechos del fútbol con Televisión Satelital Codificada (TSC, 50 y 50 con TyC Sports) y del 70% de los abonados al servicio de cable del país.
Entre otras cosas, lo que buscará el gobierno es que se transmitan por aire algunos partidos del campeonato local (de entrada serían los del ascenso) y todos los de la selección. Así, recortar el negocio de TSC y abrirlo a grandes interesados como Telecom y Telefónica.
Ezequiel Fernández Moores, columnista de este medio, en una extensa nota que publicó hace nada menos que una década, señaló: "Menem, para bien o para mal -según los gustos e intereses de quien lo mire- cambió el país. Privatizó hasta el agua potable. Impuso la cultura del ajuste hasta en la oposición. Transformó corporaciones de hierro en papel, desde los militares a los sindicatos. Y en una cirugía mayor sin anestesia su bisturí partió en dos el cuerpo social. Pero no pudo con el fútbol...". Hoy otro gobierno del mismo partido hace el intento por manejar la pelota. (Sebastián Busader) |
|
|
|
Categoría : Varios | Comentarios[4]
|
| |
|
| |
12 » Mar 2009 |
|
POR QUÉ NO SE DIJERON LAS COSAS CARA A CARA |
|
| |
Ninguno de los dos habló de más, preso de la incontinencia verbal o de un desequilibrio inconsciente. Ambos jugaron sus cartas defendiendo intereses. Ambos dijeron lo que querían decir. Y ahora sólo el tiempo dará un veredicto.
La relación entre Diego Maradona y Juan Román Riquelme terminó en un tortuoso quiebre que sacudió al fútbol mundial pero que seguramente descendió con aires de paz en el plantel albiceleste. Los medios de comunicación más importantes del país contaron ayer (no se entiende por qué no lo hicieron antes) que después de la amistosa pero importante victoria ante Francia el micro que transportaba al seleccionado se sacudió al ritmo de un cántico que impactó directo en el "Torero": "Hay que alentar, hay que alentar. Ya vino Messi, no llamen más".
Maradona comenzó a abrir los ojos. No entendía por qué el grupo, con "La Pulga", su yerno el "Kun" Agüero, Tevez y Fernando Gago a la cabeza, estaba tan negado con Román. Igual, hasta ahí su cabeza no concebía tachar de la lista de citados al "10" de Boca. Aunque sí lo apartaba del selecto grupo de incondicionales, sobre todo después de las pobres exhibiciones ante Huracán y el Táchira.
Antes de la caída con Independiente el técnico dijo lo que dijo en "Gol de medianoche". Que no veía bien a Riquelme, que Riquelme no le servía en las condiciones en las que se mostraba en la actualidad, que debía sacarse un hombre de encima y no lo hacía. Eso sí, jamás habló de "cortarlo".
Maradona no se fue de boca como tantas otras veces. Tampoco habló desde la calentura, porque Riquelme no le atendió el teléfono por primera vez ese jueves (cuatro días después había cinco llamados más sin fortuna al móvil de JR). Lo hizo esperando una reacción de Riquelme. Una reacción de "hombre de selección".
En el fondo hay una cuestión de egos, soberbias, impactos mediáticos, miserias y mucho de futbolístico. Dentro de la cancha está claro que el Riquelme actual no es de la apetencia del técnico (como lo llamó una y otra vez el mismo JR a la hora de renunciar ante las cámaras), pero al parecer tampoco le gusta el de afuera, al que nadie banca en su selección. "El grupo manda", dijo lacónico el ex astro. Como también tiró una señal en el inicio del ciclo al asegurar que la albiceleste es "Mascherano y 10 más". Messi, a quien parecía ir destinado el mensaje, no le prestó demasiada atención. Reaccionó bien. Riquelme no tanto.
Román habló de "códigos" pero su renuncia volvió a ser frente a las cámaras de Telenoche. Lo hizo conociendo el efecto de los medios sobre los hinchas, intentando sacar provecho de una situación que él también generó.
El runrún daba vueltas antes y Maradona no esperó: salió por La Red antes que las preguntas de Santo Biassati e hizo saber que el jugador que da un portazo no tiene retorno al predio de Ezeiza. Igual, Román no titubeó. Rompía así con el "sidieguismo". Dijo sentirse y expuso que se enteró "por radio" de que no viajaba a Francia y por tevé de las críticas de Maradona hacia su juego.
Quizá sea cierto. El técnico visitó a Messi y a Agüero en España, a Mascherano y a Tevez en Inglaterra, a Demichelis en Alemania y a "Licha" y a "Lucho" en Portugal. Con JR, jugador habituado a los elogios y los caprichos, no volvió a hablar en persona. Está más que claro que Riquelme se veía más afuera que adentro del once de Maradona y por eso tiró todo por la borda.
Está claro que Maradona, sobre todo después del partido con Francia, comenzó a concebir un equipo sin Riquelme. Lo demás es juego mediático, mucha soberbia y una fuerte lucha de intereses. Porque la solución era más que sencilla: los dos, a solas, diciéndose las cosas en la cara. (S.B) |
|
|
|
Categoría : Varios | Comentarios[9]
|
| |
|
| |
| 1 |
|
|
|
