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Britney podría verse un poco distinta pero esta es la idea
Hasta el nacimiento de sus hijos, uno detrás del otro, Britney Spears fue una aburrida joven diva del universo pop. Otro intento por alcanzar el cetro que ya hace una punta de años mantiene en alto Madonna. Pero la chica que lucía vestidos sexys y caminaba derecho pero en diagonal por los pasillos de su escuela, nos tenía reservadas no una sino varias sorpresas.
Primero se desdijo con hechos y no palabras de su juramento de llegar virgen al matrimonio cuando anunció que estaba embarazada. Luego, ante la mirada ansiosa de la industria y de sus fans, que esperaban su regreso triunfal, el típico, con 20 kilos menos, jovial y fresca como si nunca hubiera amamantado ni transcurrido por el estrés de cuidar un bebé, Britney, ups!, lo hizo de nuevo y se volvió a embarazar. Finalizado este, comenzaron los escándalos y su vida pública paso de monótona a entretenida a peligrosa. Se juntó con la gente adecuada y siguió hasta el próximo nivel. En algún momento perdió totalmente la conciencia de sí misma y de lo que estaba viviendo. De modo que no tuvo reparos en quitarse la ropa y aparecer torpe, deslucida y con varios kilos demás en directo para todo el planeta.
Para la mayoría de los chicos, y no tanto, Britney, rellenita y todo, seguía siendo una piba muy sexy.
Una cosa llevó a la otra. Su vida despreocupada preocupó a su marido y a los jueces que finalmente la separaron de sus chicos. Una vez más se pasó de copas y de estimulantes. Desde hace unas semanas Britney no hace más que entrar y salir de clínicas y reclusiones varias, lugares donde pretenden ponerla en vereda.
Lo cierto es que quizás la parte más jugosa de la vida de esta estrella está transcurriendo ahora mismo. Esta crisis, estas incursiones por los laberintos del sistema y los senderos prohibidos de la distorción química, la han mostrado verdaderamente humana. Mas real. Sus discos se siguen vendiendo. Su fama muy lejos de decaer no hace más que subir.
Es que toda persona, y especialmente toda chica, seguramente alguna vez se ha sentido tentada de mandar a todos a freir espárragos para luego salir de ronda infinita. En eso anda Britney por estos días, entre el cielo del goce y el infierno de la represión.
Mientras tanto, su carrera podria dar un nuevo giro. Se dice que Quentin Tarantino la quiere para que sea la protagonista de su próxima película. ¿El papel?: una desnudista asesina. Okey, Quentin sabe lo que hace.
Su padre será su tutor
La película que quiere llevar Tarantino al cine |
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