Y cada tanto nos pasa. Que escuchamos una canción, leemos un libro, vemos una película, y queremos que algún amigo sea parte del ritual. Que experimente a su modo, lo que el arte nos ha hecho vivir. Eso me pasa por estos días con Sigur Rós, que me quedaría en la esquina diciendo lo bueno que son. Acá un video en vivo, junto a Bjork, en el que interpretan un tema que escuché días atrás y que también recomendé en el blog.