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Libros
Tierra del fuego, de Francisco Coloane. Uno de los más grandes narradores de la Patagonia. Son historias de pioneros, bandidos y aventureros. Escritas con equilibrio, cuidadosamente.
Música para camaleones, de Truman Capote. Finalmente releí este libro magnífico con la idea de escribir una reseña para la sección de Cultura y Espectáculos del diario “Río Negro”. Un adelanto: “Muchos pero muchos años después de que Truman Capote alcanzara el cénit de su carrera con la publicación de “A sangre fría”, el escritor elaboró una serie de textos “no ficción” reunidos bajo el nombre de “Música para camaleones”.
Capote, quién evidenció problemas creativos y de adictivos luego de su famoso libro, no hizo más que acentuar aquí ciertas características con las que su escritura venía cargando desde hace tiempo. El autor de “Se oyen las musas”, había encontrado en la no ficción (¿O deberíamos decir en el periodismo?), su mejor forma literaria. Hubo quien lo apuntó con el dedo asegurando que, en rigor, Capote había perdido toda capacidad inventiva por lo que no tenía más remedio que acudir a la calle en búsqueda de historias intensas.”
Películas
No country for old men. De Ethan Coen, Joel Coen. Un rayo oscuro que atraviesa la luz de la existencia. Y la vuelve evidente. La muestra tan frágil como es. Como somos. Destinos griegos. Llendo más allá de nuestras posibilidades. Dejando leyendas en todos lados. Asesinos, aventureros, almas cansadas. Me gustó mucho este filme.
Dan in real life: ver comentario más abajo.
Revolver: una película de acción con una idea que la atraviesa de lado a lado: el ego como entidad que nos confunde y nos atrapa. |
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