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08 » Mar 2008 |
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Paola Kaufmann |
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Hoy, 8 de marzo, la escritora rionegrina Paola Kaufmann cumpliría años. Pocos para no estar aquí celebrando. Demasiado pocos.
Pienso en ella y no puedo dejar de imaginarla riéndose a carcajadas mientras se lee a sí misma en la sección necrológicas; mandándonos a todos a la puta madre que nos parió para luego abrazarnos y agradecernos las boludeces que decimos de ella.
Paola fue para mí una especie de Alicia en el País de las Maravillas, dueña de un mundo inventado y gozoso, su guarida. Alicia, Paola, una mina valiente, que escribió desde un potente acto de metamorfosis y de transfiguración.
Adoraba su sentido del humor, el que imprimió a sus cuentos, que hasta el día de hoy leo para divertirme y que recomiendo fervorosamente para que den a los estudiantes secundarios (sobre todo los de ésta, su región); su rigor descriptivo, su capacidad de sumergirse en aguas profundas, su empatía.
No fue azaroso que se encontrara con Emily Dickinson en su camino de escritora, ni que asumiera la voz de su hermana; tampoco que revolviera todos los archivos sobre el Nahuelito para meterse en el cuerpo de Ana, donde se encontró- como le gustaba decir- con “todos los monstruos todos”. Tampoco lo fue que en momentos de despedirse estuviese pensando en escribir una novela negra.
La extraño a veces. Otras siento que no tiene sentido pensar que está entre cuatro maderas porque ella estará allí, en sus libros, siempre. |
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Categoría : Cultura, Educación, Trabajo |  Comentarios[7]
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