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Querido Marcelo: utópicamente de acuerdo con vos; pero te aclararé algo que ni falta hace:
1) Los abogados ni contribuyeron jamás ni contribuyen ni contribuirán nunca (y menos desde el Colegio de los Cuervos) a la paz social, porque justamente se benefician de las grescas, de los litigios, de los presos, de los que no pueden pagar, de lo que no quieren pagar, de los pendencieros, de los pobres y de los ricos y de cuanta más inequidad exista, mejor! El único interés, medio, incentivo y destino de los cuervos es el JU$ y punto.
2) La mayoria de los que no sirven ni para abogados, acaban filtrándose dentro del poder judicial y, más o menos (más temprano que tarde), acaban siendo jueces o ficales (como el inepto de Vignarolli, y como tantos que quedan bien atornillados, y como unos pocos que se han ido). Los jueces y demás funcionarios que aman el derecho, que se actualizan, que además ejercen docencia en sus quintitas (o en la universidad), ésos rara vez mejoran laboralmente; es más, algunos acaban simbiotizándose con la utilería humano-roboticoide imperante, silenciados por sus pares (¡es una saga!).
3) Muchos judiciales están repodridos de enseñarles a trabajar a los prosecretarios y subsecretarios, que entran sin saber qué es lo que deben hacer ni controlar aquéllo que deben controlar; de modo tal que es imposible que en tantos juzgados donde abundan caciques en vez de indios, a los indios se les pida que sigan bancándose a tanto cacique nuevo, menos preparado que los anteriores, más conflictivos que los anteriores y mucho más subido a caballos, mulas y, sobretodo, burros (de los que también se mimetizan) y que sigan bancándose un crecimiento desmesurado de trabajo, un crecimiento —diría— incontenible. El empleado judicial a gatas cumple con parte de la tarea que es desbordante, porque —en vez de crear secretarias y enchufásrselas a los jueces pero con varios empleados—, con muchísimo más gasto público, crean cargos altos que son cubiertos por abogaduchos nuevos con ínfulas pero sin preparación.
4) Los justiciables pocas veces (y muy tarde) llegan a una cuasi satisfacción porque, si son pobres, para acceder a la jurisdicción deben sacar turnos para que le den un turno, para que un empleado lo atienda para que le dé otra fecha para que algún defensor lo escuche (si es que no encuentra causa para lavarse las manos y no atenderlo); si no son pobres, quedan cautivos de sus abogados, primero, y de la lentitud de un servicio, luego. En las fiscalías, a las víctimas las tratan así nomás porque carecen de preparación adecuada, de espacios adecuados de trabajo y porque, por encima de empleados excedidos de trabajo, hay fiscales refunfuñeros que (fuera de los expedientes pero dentro de sus recintos) se critican mutuamente porque unos laburan y otros se rascan.
Mientras en los juicios civiles gana el que mejor mintió, en los laborales gana quien mejor recordó en un instante los datos que le arrimó a su abogado y en un juicio penal nadie gana porque la mayoria se extingue con el transcurso del tiempo.
Pero lo peor de todo es que la cabeza del Poder mismo tiene las neuronas desconectadas; cumplen un rol más ridículo que el de las viejas con capelina del del Reino Pirata y el trocito del nortey huelen a rancio. Si les hacés una entrevista a los más viejos que han estado co-gobernando (?) y a los que co-gobiernan (?) te das cuenta que el léxico limitado que tienen no concuerda con las opiniones de sus votos, lo que equivale a pensar que alguien les escribe/ía los votos (y no creo que gratis)...
...entonces ¿de qué paz social posible desde el ámbito judicial me hablás? Vos no podés decir que el colegio es de cuervos, vos debés decir que es de abogados y procuradores; vos no podés decir que está lleno de viejos soretes, yo sí. Vos no podés abrir la boca del todo porque te crucifican mal y te preparaste para vivir de abogado; yo ya estoy jubilado; pero creéme, Marcelito, que ésto, con el zafarrancho que han hecho, con la ausencia ética de quienes pertenecen a la jet-set-jurix, no se arregla sino luego de que se mueran unos cuantos (y sin garantía que los nuevos no se copien las mañas, es más, con la certeza que varios se las aprenden incluso antes de ingresar).
Lamento ver un panorama muy negro, sobretodo, porque de ninguna manera podés pedirle a los empleados judiciales más de lo que están dando (los que dan, porque los que no dan ya están "en el sistema" y se cuidarán apropiadamente de no generar ninguna situación que amerite un sumario).
Desde que compartimos laboralmente (vos y yo) un edificio laboral donde la mugre abundaba en la sala de secuestros y en los rincones de expedientes inundados, roidos y abandonados, hasta ahora, parece que las condiciones de trabajo mejoraron un poquito con la iluminación, la informatización, pero parece que aquella cosa sin higiene ni prolijidad, ha ido subiendo a la mente gobernante de quienes administran justicia. Ésta es mi desenfadada y sincera opinión. La del ciudadano común es peor. Preguntá por la calle. Averiguá. Hace años una pobre sirvienta de una funcionaria judicial bregó por las defensorías de pobres para conseguir quién atendiera su clamor de madre y judicial. Todos los defensores, adjuntos, subrogantes, todos, absolutamete todos se excusaron in voce de atenderla ¿por qué? ...pues porque quería demandar a su patrona yerma que le había hurtado el niño, mintiéndole. Un juez le dio la adopción a la patrona funcionaria, pero la pobre sivienta no consiguió asistencia legal. Cuando una abogada del fuero se ofrecio a atenderla gratis, ya había sido amenazada y no regresó más a los pasillos. Probablemenet siga limpiando la suciedad de la funcionaria, probablemente nadie más descubra que hubo un niño con dos DNI y, casi-casi, con tres... porque la funcionaria (además) lo asentó como propio y luego tramitó su adopción. El hijo (o hija, eso no lo sé) tampoco jamás sepa que tiene dos DNI en una misma Provincia. Si éstas y otras cosas ocurren, y muchos cómplices secretos o asustadamente cómplices callan, de qué paz me podés hablar? ¿de qué equidad? Esto es sectario y, como decía una ex-compañera civil, actual notidficadora, es "una mezcla de obispado con regimiento", pero con lo peor de la inquisición y lo peor del autoritarismo. Si no es así, que alguien me lo explique y me lo muestre (capaz soy un tío resentido como mucha veces me han acusado en este mismo blog los abogaduchos recién recibidos y muy mal preparados, escondidos destrás de pseudónimos, como también se esconden destrás de itinerantes y de ocasionales pseudónimos tanto funcionarios como magistrados).
Aunque no me gusta hacerlo, y dado el carácter de mi posteo desde el principio, te saludo, Macerlito, con el cariño y admiración de siempre. Clemar |