Ágiles, los usuarios del blog me pusieron sobre aviso rápidamente de que los pedidos de Jurado de Enjuiciamiento en vigencia son siete y no cuatro.
A los ya mencionados unos post más abajo se agregan las presentaciones contra la jueza Mirtha Felau y contra los fiscales Santiago Terán y Marisa Czajka.
Dejo constancia de que salvo el publicitado caso Vignaroli y el de Zapperi, cuyos detalles me llegaron hoy, no tengo ningún dato sobre los restantes pedidos de jury.
Hay cuatro pedidos de jurado de enjuiciamiento en marcha en estos momentos.
Son contra el fiscal Pablo Vignaroli y contra las juezas Paula Stanislavsky, Nancy Vielma y Ana Lía Zapperi.
Sobre esta última me enviaron copia de la presentación. El pedido de jury está fundamentado en que “la Juez (sic) Zaperi, ya sea mediante medidas Jurisdiccionales o meramente procesales , obstaculiza los derechos de la Libertad Sindical de varios trabajadores, y transgrede con ello normas de jerarquía constitucional como el Convenio de OIT y decide ignorar la Jurisprudencia de la CSJN”.
Por unanimidad, el Jurado de Enjuiciamiento que hace casi un año absolvió a la jueza laboral Elisabeth Rivero de Taiana ratificó que el gremio Sejun debe pagar las costas del proceso.
El Jurado volvió a reunirse para tratar la apelación del Sejun, denunciante, al pago de las costas.
La jueza, recordarán, se jubiló meses después de que el jury se pronunciara. El concurso para designar a su reemplazante acaba de ser publicado.
Las versiones indican que el Jurado de Enjuiciamiento tiene los votos necesarios para suspender al fiscal Pablo Vignaroli e iniciarle el proceso, lo cual podría ocurrir esta semana o la próxima.
Pero los rumores no coinciden en quiénes votarán a favor y quiénes en contra de declarar admisibles las denuncias de Convocatoria Neuquina (al final de este post está la ampliación que presentó la ONG, ya como amigos del tribunal).
Mucho menos avanzan sobre otros aspectos igualmente interesantes: si todas las causales serán admitidas, si Vignaroli se quedará a enfrentar el jury o renunciará, si ensayará recusaciones en masa, y un abanico amplio de posibilidades que se abren a partir de la hipótesis inicial.
Para que el jury se abra son necesarios como mínimo cuatro votos.
La versión que se mantiene inalterable desde hace unas semanas es que dos de los integrantes del Jurado, Oscar Massei y Graciela Martínez, votarán a favor de la admisibilidad.
Guillermo Labate, el tercer vocal que forma parte del jury, integraba este lote pero hoy me dijeron que hay dudas.
Es un dato fundamental: si Labate vota en contra, quiere decir que Sapag está en desacuerdo con el jury (por las razones que cada uno quiera imaginar) y no hay mucho más que decir (ni que esperar). A menos que la estrecha relación que une al gobernador con el único vocal al que eligió sin consultar a nadie se haya deteriorado en un grado superlativo.
Seguimos.
En el jury hay dos diputados: José Luis Sáez, radical, y Jorge Della Gáspera, del MPN.
Del primero se dice que escuchará los consejos de su par Marcelo Inaudi. Del segundo, que escuchará la voz del gobernador. Con lo cual se vuelve a depositar el peso de la decisión sobre Sapag.
Y por último, en el jury hay dos abogados: una es María Alejandra Giunti, esposa del ex ministro Walter Jonsson; a quien se considera un posible voto más por el jury. El otro es Jorge Brillo, quien resistió todos los embates que se hicieron para sacarlo de la cancha bajo sospechas de su parcialidad.
Brillo sería en apariencia un voto seguro a favor de Vignaroli. Sin embargo hay quienes especulan que una vez reunidos los votos necesarios para abrir el jury, el ex asesor General de la Gobernación podría sumarse al grupo mayoritario.
Todo lo anterior, por supuesto, no implica irremediablemente que alguno de los siete jurados violentará su conciencia emitiendo un voto contrario a sus convicciones, saberes y razones. Pero en un juicio de semejante calibre y a la luz de experiencias anteriores no podemos abstraernos del contexto ni ignorar que hace meses que se viene postergando la decisión de fondo, lo cual ha engordado el caldo de las especulaciones.
Y como decía más arriba, hay matices: algunos pueden votar para que se abra el jury por todas las causales, otros por sólo algunas.
En las manos de Vignaroli, fiscal de Delitos contra la Administración Pública, estuvieron las causas de presunta corrupción más resonantes de la era sobischista. Una en particular puede traer serios dolores de cabeza a mucha gente en caso de que sea revisada: los créditos otorgados por el IADEP para el llamado “Chañar III etapa”.
Se están acumulando muchas actividades para el martes 13.
Desde la mañana, en el Consejo de la Magistratura, entrevistas personales a los/las candidatos/candidatas al juzgado civil de Neuquén.
A la tarde, reunión del Jurado de Enjuiciamiento por dos.
Primera parte, tratarán la solicitud de Convocatoria Neuquina de sumarse como amicus curiae al Jurado de Enjuiciamiento pedido contra el fiscal Pablo Vignaroli.
Por ahora la ONG es denunciante y puede tomar vista de las actuaciones.
Segunda parte, se integrará el jurado para analizar el pedido de jury que un particular de Cutral Co presentó contra la jueza civil Paula Stanislavsky.
Y posiblemente, si no sucede antes, se definen las recusaciones en la causa de la zona liberada.
Cabuleros, timberos, supersticiosos y agoreros sacarán sus conclusiones.
Por mi parte, lo peor de este martes 13 es que viene después de un fin de semana largo y cuesta empezar más que si fuera lunes. Aunque en mi caso no tengo fin de semana largo, al igual que muchos otros periodistas. Bueno, bueno, está bien, no me quejo más.
Después de mucho tiempo sin noticias, de pronto de tres fuentes me llegan noticias sobre la marcha (es un decir) del jurado de enjuiciamiento contra Pablo Vignaroli.
Todos los días, los abogados Jorge Brillo y Alejandra Giunti van a leer expedientes al Tribunal Superior de Justicia. También lo hacen asesores del diputado radical José Sáez (UCR) mientras que el emepenista Jorge Della Gáspera va personalmente.
Los expedientes que leen, claro, son aquellos en los cuales intervino Vignaroli con supuesta negligencia, por eso le pidieron el jury.
El análisis viene lento, y recién a fin de octubre podría haber una nueva reunión plenaria para definir, de una vez, si declaran admisible o no las denuncias. Bastante tiempo, si se tiene en cuenta que la denuncia fue presentada en mayo.
Vignaroli se lo toma con calma. Es más, se fue unos días de licencia a esquiar, su gran pasión.
Fíjense aquí, con un poco de suerte tal vez lo vean pasar y todo.
La ONG pudo acceder al expediente por los considerandos de un acuerdo citado unos post más abajo.
En la página están la excusación de Ricardo Kohon de integrar el Jurado de Enjuiciamiento (click aquí) y la negativa de Jorge Brillo de apartarse como jurado (click aquí).
Me parece que los términos de la excusación de Kohon dejan muy expuesto a Brillo, ex asesor General de la Gobernación, quien ya no tiene manera de justificar su presencia en el jurado.
Brillo, si bien salió elegido por el azar de un sorteo en la Legislatura, representa en este jury a los abogados. Hasta ahora no se conoce que el Colegio se haya pronunciado sobre este tema de evidente interés público.
Tampoco lo hizo el fiscal de Estado Raúl Gaitán, quien debería ser el encargado de sostener la acusación en un eventual jury. En realidad Gaitán también tendría que apartarse para dar más transparencia al proceso.
Y todo esto es una garantía, en primer lugar, para Vignaroli, a quien no le conviene ser evaluado por un jurado bajo sospecha.
El jury ingresó ahora en una pausa. Los jurados están leyendo los expedientes en los cuales intervino Vignaroli para decidir si declaran admisible las denuncias en su contra.
El diario sugiere hoy que este caso hay que seguirlo de cerca en especial después de la última cumbre JAS/JOS, y tira un pronóstico sobre cómo están las posiciones dentro del jurado: Massei, Corvalán y Labate a favor del jury, Brillo y Giunti en contra, y la definición está en manos de los diputados Della Gáspera (MPN) y Sáez (UCR).
Agregamos una versión más: se dice que si abren el jury, los abogados defensores serán dos amigos declarados del fiscal: Martín Segovia y Eduardo Badano.
Hoy se reunió el Jurado de Enjuiciamiento para tratar el caso Vignaroli.
Se resolvió rechazar la recusación de los denunciantes (Convocatoria Neuquina) contra el ex asesor General de la Gobernación, José Brillo. Pero podrán ver el expediente.
El partido sigue, aunque uno de los árbitros está bajo sospecha.