Sarah Jessica Parker no quiere que la confundan para nada con su personaje en "Sex and The City", Carrie. "Somos totalmente diferentes", afirma la actriz en entrevista con dpa.
"Nuestras vidas son radicalmente diferentes", opinó Parker, cuya versión cinematográfica de la serie de televisión llega esta semana a los cines.
Carrie se caracteriza por ser una soltera a la que le encantan las fiestas y el sexo y vive en el corazón de Manhattan.
Por el contrario, Parker está casada con el actor de Hollywood y Broadway Matthew Broderick, de 46 años, y ambos tienen un hijo, James, de cinco años, con quien viven en West Village, explica la artista.
Pero también Carrie se transformó en los seis años de serie de tv y sobre todo en su primera película de cine, según Parker, de 43 años. "Carrie se ha vuelto mucho más reflexiva, busca el sentido de su vida", señaló la actriz.
"Ella es ahora mucho más sabia y menos frívola y desconsiderada".
Por eso hay características de Carrie con las que puede identificarse, como "por ejemplo su entrega a sus amigas. Es una persona muy honesta y leal, eso es realmente digno de admiración". Parker no se imagina en una película o sobre el escenario junto a su marido.
"Si los dos nos vamos por la tarde a la misma hora de casa, ¿quién va a acostar a nuestro hijo? ¡No!"
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