Un crucero siempre invita a soñar.
A vivir momentos de confort extraordinario con mucho de glamour, también.
Esto es lo que vivimos en el COSTA MAGICA, días atrás, desde el puerto Santos, cerca de San Pablo hasta Bahía, pasando por Río de Janeiro y Ilhabela.



Lo que vivimos en este crucero es un anticipo de lo que podrá vivir la Argentina a partir del próximo año, cuando la empresa líder de viajes de este tipo, en alta mar, ofrezca este servicio por estos lugares. Que se anticipa será un éxito total. "Es uno de los pocos rubros del turismo, el de los cruceros, que no se ve afectado por la actual recesión mundial. Es más, va en crecimiento", sostiene Carlos Núñez, director de Costa Cruceros para Sudamérica. "Carlos Núñez, director de Costa Cruceros para Sudamérica afirmó: “Cómo ya es una constante en Costa, durante la temporada 2009/2010 continuaremos incrementando nuestras inversiones, asumiendo mayores desafíos, apostando siempre por la innovación y el crecimiento. Es realmente un orgullo ofrecer a los argentinos productos de tan altísima calidad internacional, como el Costa Mágica y el Costa Victoria, que temporada tras temporada adelantan su decisión de vacacionar apoyándose en las atractivas promociones que brindamos entre muchos otros beneficios”.


Además del Costa Magica, la compañía posicionará también en Buenos Aires el Costa Victoria y desde Brasil el Costa Concordia para completar la temporada 2009-2010 en Sudamérica. Juntos ofrecerán un abanico de itinerario, 40 cruceros en total entre diciembre y marzo, 25 con salidas desde Buenos Aires – que incluyen prácticamente toda la costa brasilera con transatlánticos, mini cruceros y cruceros de 7, 8 y 9 noches.


Durante el transcurso del viaje pude hablar con el comandante del crucero, Michele De Gregorio, un tano que inspira tanta autoridad como estima de inmediato. Nacido en Molise, Italia, en 1952, admite que "en realidad fue concebido en el mar. Concretamente en un barco de la empresa de navegación Flotta Lauro, que transportaba emigrantes de Italia a Australia y en el que mi padre se había embarcado como contramaestre".
De ahí que de todos los hijos él eligió acompañarlos en los viajes. "La primera vez que me embarqué fue en 1969, en el M/N Amalfi". Su carrera en el Costa se inició en el 2005 hasta la actualidad.
Mucho adelanto tecnológico, quizás demasiado, confía, pero "el ojo humano sigue siendo fundamental a la hora de surcar las aguas del mar", reconoce.
Canchero, entrador, invita por su área de trabajo, más que restringida para el público en general que anda por ahí, en cada uno de los once pisos de este crucero, en algún metro cuadrado de los casi 400 de largo por casi 100 de ancho...
Los interiores de Costa Mágica están inspirados en los paisajes y la cultura de Italia que es evocada a través de obras de arte que simbolizan lo más representativo de la cultura latina, destacándose el Magica Atrium, corazón del Costa Magica que es un lugar de encuentro para todos los huéspedes del barco, elevándose hasta una altura de 9 pisos. Desde allí es suficiente mirar hacia abajo y admirar la escultura de bronce titulada “Eravamo in 4 siete rimasti in 3” de Incola Salvatore, para apreciar lo impactante de las numerosas obras de arte exhibidas a bordo.
Su teatro diseñado en tres niveles, tiene capacidad para 1.300 personas, y gracias a un equipamiento tecnológico de última generación, tanto en iluminación como en acústica, se lo considera uno de los mejores teatros del mundo.
El lounge principal del barco se extiende por más de 1.000 metros cuadrados. El Grand Bar Salento es uno de los bares más grandes que se puede disfrutar actualmente en un crucero. Y su restaurante Smeralda agasaja con amplios ventanales de vidrio con vista al océano y dos pisos de magnífica decoración. Entre estos dos sitios, fundamentalmente, anduvimos de show en show, con vasos con caipiriñas en mano, una costumbre de rigor en esta altura del planeta.
El Casino se inspira en antiguas tradiciones sicilianas con imágenes y marionetas reales. Las 65 marionetas fueron realizadas por el artista Emanuele Salamanca y le otorgan una singular originalidad.
La disco del barco propone un ambiente brillante y colorido rodeado de paredes de vidrio que se asemeja a una playa italiana: hay mesas con sombrillas de playa, y el piso tiene un efecto “arena” especial que crea la atmósfera de una fiesta a orillas del mar. Las paredes se experimentan como fantásticas olas gracias a la decoración con mosaicos de Ceramiche Bisazza, mientras un sol gigante cuelga sobre la pista de baile.
Otra de las característica principales del Costa Magica es su spa de más de 1300 metros cuadrados, que incluye un sauna, baño turco, un centro de belleza que ofrece tratamientos y masajes, además de un espacioso gimnasio donde los huéspedes pueden usar los más modernos equipos de Tecnogym, así como bicicletas de spinning y escaladores.
Este crucero que tomamos se regía por un tema, "el fitness". Por lo tanto teníamos infinitas charlas, informaciones y prácticas sobre "el buen vivir" y "el vivir sanamente".
El puente superior de popa de Costa Magica está construido con un techo autodeslizante que permite a los huéspedes disfrutar de la piscina y los dos jacuzzis bajo cualquier condición climática. Toda el área tiene como eje visual una bellísima escultura de bronce de Bruno Lucchi dedicada a Poseidón, el Dios del Océano.


Subir para vivirlo.
Para dejarse llevar.
Para olvidarnos, por un rato, del controlar el timón de la vida para relajarnos de felicidad.


Más info:www.costacruceros.com