Lunes 27 de octubre de 2003
		Conmovedora carrera de los bastones blancos
		Al trote, los no videntes recorrieron 7,5 kilómetros en Neuquén
		NEUQUEN (AN).- “Otra vez fue una experiencia hermosa”. La frase es de Jorge, 33 años y el primero en cruzar la meta en la marcha aeróbica que se hizo ayer en esta ciudad para ciegos y disminuídos visuales. “Es una satisfacción enorme poder enseñarle y mostrarle a la gente cuál es la finalidad del bastón y cómo nos sirve para independizarnos”, agregó. El fue una de las 200 personas entre no videntes, atletas y familiares que participaron por segundo año consecutivo de esta prueba. La organización estuvo a cargo de la escuela especial 7 y se hizo en el marco del Día Internacional del Bastón Blanco. El objetivo, explicó la docente Virginia Blanco, “es lograr que nuestros alumnos se integren en igualdad de condiciones con aquellos que participan de esta actividad, además de enseñar el significado que tiene el bastón”. Por este motivo, minutos después de las 15, los chicos, jóvenes y adolescentes que concurren a la escuela largaron desde la meta acompañados por corredores, profesores de gimnasia y familiares. Lo hicieron unidos a sus guías por una soga corta en una mano y con el bastón en la otra. “La idea de la soga es lograr la unidad”, aseguró Dante, el corredor neuquino que acompañó al ganador de la marcha. “Y nosotros parece que lo conseguimos”, deslizó y luego disparó la carcajada de Jorge quien en la edición anterior obtuvo el segundo lugar. La prueba se hizo en el centro de la ciudad con un recorrido total de 7,5 kilómetros. Fue abierta y el ganador en la categoría individual fue el corredor Luis Trujillo. Arrancó en Sante Fe al 800, donde está la sede de la escuela, continuó por Pinar para seguir por Avenida Argentina hasta Alberdi, para luego retomar Santa Fe. En tres vueltas, se completó el total del trayecto. También se disputó una marcha de 2,5 kilómetros -una sola vuelta- de la que participaron las 200 personas que se acercaron hasta el edificio de la escuela. Esta fue la segunda edición de la prueba. La primera se hizo el año pasado. Anteriormente, recordó Blanco, se realizaban encuentros en la escuela de los que participaban sólo familiares. “Por eso decidimos implementar esta metodología para lograr una mayor adhesión y contar con la participación de distintos sectores de la comunidad”. Respecto a esto último, los organizadores se mostraron conformes con la respuesta que obtuvieron. Además resaltaron la colaboración del municipio neuquino, que declaró de interés municipal la actividad, y brindó el apoyo logístico para cortar el tránsito automovilístico y garantizar la seguridad de los corredores. También el Consejo Provincial de Educación (CPE) dio su respaldo. Incluso el titular del organismo, Mario Pilatti, participó de la prueba. Junto a los docentes y alumnos de la escuela especial 7, estuvieron presentes aquellos de los jardines 41 y 46, de la EPET 8 y el CEF 1. “El bastón es el emblema de la independencia que tienen las personas con discapacidad visual”, indicaron finalmente los docentes de la escuela.
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