Miércoles 15 de octubre de 2003

Un fuerte viento se llevará este "veranito"

Las temperaturas volverán a bordear los 30 grados en la jornada de hoy, pero al caer el día y mañana ya se notarán las consecuencias del viento, que llegará a 80 kilómetros por hora.

 

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El termómetro llegó ayer a los 35 grados, para goce de algunos y sufrimiento de otros.

CIPOLLETTI (AC) Un viento de hasta 80 kilómetros por hora se llevará hoy este "veranito" que desde la playa hasta el valle muchos disfrutaron y algunos padecieron. Mañana ya estará más fresco y el viernes volverá el calor, aunque con menor intensidad.

El calor que en el Valle se disfrutó durante el fin de semana largo que pasó fue ideal para todos. Pero los 35 grados de ayer, una jornada laborable, tuvo a muchos a mal traer.

El centro de pronósticos de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC), advirtió que los vientos de hoy tendrán intensidades de entre 35 y 80 kilómetros por hora, tanto en el Alto Valle como en el Valle Medio y la zona de influencia de la ciudad de Neuquén.

En la zona costera de la provincia de Río Negro, en cambio, el viento -que tuvo ayer mayor intensidad- será más leve: de entre 15 y 45 kilómetros por hora.

Será, seguramente, un día complicado porque hasta que el viento haga bajar la temperatura, habrá que soportar un calor de hasta 27 grados en la franja que va desde Senillosa, en Neuquén, hasta Río Colorado.

La máxima que pronosticaron los especialistas de Cuencas para hoy en la zona costera rionegrina (desde Viedma hasta Las Grutas) es de entre 27 y 30 grados, que se transformarán mañana y el vier-nes en 20.

A partir de mañana, el gra cambio estará dado por la amplitud térmica entre el día y la noche, que es una característica de esta zona del país.

Por caso, la mínima pronosticada para mañana en el Valle es de entre 0 y 3 grados y para el viernes, de entre 3 y 6.

Con estos datos se diluye, afortunadamente, la posibilidad de que caigan heladas en la región de cultivos de ambas provincias.

También en la cordillera sur de Río Negro y Neuquén la temperatura bajará drásticamente hasta mínimas de 1 grado bajo cero. Y el viento soplará hoy también con fuerza: hasta 60 kilómetros por hora.

Durante el día la temperatura oscilará hasta mañana entre los 8 y los 10 grados en esa zona. El viernes, como en el resto de la región, subirá hasta una máxima de unos 12 grados.

Para entonces, en la zona montañosa de los lagos el viento ya no será tan intenso y la temperatura mínima se colocará entre los 2 y los 5 grados.

La máxima de ayer llegó a los 35 grados

NEUQUEN (AN).- "Salimos del taller y nos vinimos para el río, no se aguantaba más, techo de chapa, insoportable". Faltaban unos minutos para las seis de la tarde cuando media docena de pibes (estudiantes de una escuela técnica) chapoteaban en la orilla o se hundían más adentro en las transparentes aguas del Limay. Fue el primer baño de la temporada y a esa hora el termómetro estaba por acercarse a la máxima de la jornada.

"35 grados a las 18,10", aseguró anoche la voz segura que facilita los registros oficiales del Servicio Meteorológico Nacional, con base en el aeropuerto internacional del Neuquén. La temperatura de ayer no tiene muchos antecedentes a esta altura del año Como los chicos estudiantes, muchos valletanos escaparon hacia la zona ribereña en busca de algo de fresco y no faltaron los valientes que se zambulleron sin pudor por los blancos que se esconden bajo las ropas.

En el balneario de la calle Gatica de Neuquén, no sólo chicos fugados del taller de su escuela aseguraban que el agua "está re buena" -remarcaron- pero los tonos violáceos de su labios parecieron desmentirlos. "Cuando estás adentro no se nota, pero cuando salís..brrrr", agregó uno de los seis chicos, todos en franca retirada de la infancia.

Con una humedad que osciló el 30% y una levísima brisa (apenas cuatro kilómetros) el calor se hizo sentir durante toda la jornada e incluso bien entrada la tarde. Por caso, siempre de acuerdo con el servicio que depende de la Fuerza Aérea, a las 20 el termómetro marcó 28,8 grados.

En el balneario Río Grande no hubo tantos valientes como en Gatica pero sí muchos que se mantuvieron estoicos en la orilla, con los pies en remojo. En el más cheto de los balnearios capitalinos salta a la vista la necesidad de mejorar la zona costera, terriblemente despareja desde el año pasado, cuando se realizaron una serie de obras hídricas para frenar la violenta crecida del río Limay. Este año, los temores son por la escasez, evidente y pronosticada. Para estos días, también se espera comiencen las tareas de reparación de los locales de la calle Democracia, que a partir noviembre volverá a ser peatonal.

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