Los diputados neuquinos cierran con la peor nota

Sólo sesionaron 19 veces y el período termina el 31 de este mes.

Es el promedio más bajo de la actual gestión parlamentaria.

NEUQUEN (AN).- Los legisladores apenas realizaron 19 sesiones en lo que va del año lo que representa el peor registro de toda la gestión que comenzó el diciembre de 1999. Y aunque el período ordinario finalizará el próximo 31 de octubre, la marca de 34 encuentros que alcanzaron en 2000, parece inalcansable En rigor, los 35 diputados neuquinos no sesionan desde el pasado 4 de septiembre. En la oposición piensan que "el oficialismo quiere hacer la plancha hasta el 10 de diciembre" cuando tenga una holgada mayoría para darle vía libre a los proyectos codiciados por el gobernador Jorge Sobisch y que fueron postergados por la negativa de la oposición. Para algunos diputados del MPN, en cambio, la oposición "no ha tenido voluntad de diálogo".

Más allá de las explicaciones de uno y otro, es probable que este año legislativo quede en el olvido por la escasa actividad parlamentaria. Esa virtual inactividad se reflejó además en las comisiones parlmentarias, donde los legisladores del MPN son los más faltadores de acuerdo a los datos oficiales que "Río Negro" publicó en agosto último. La semana pasada sólo la Comisión de Asuntos Constitucionales -de las once permanentes- funcionó con el quórum de siete diputados. Sin embargo, los asistentes no despacharon ningún proyecto para su tratamiento en el recinto. Por lo tanto, sin proyectos para debatir se suspendió la convocatoria a sesión prevista para el miércoles pasado Las 19 sesiones que celebraron los legisladores desde abril a la fecha representa dos tercios de los encuentros parlamentarios que se desarrollaron el año pasado. Y está muy distante de las 34 sesiones que hubo entre el 1 de abril y el 29 de diciembre de 2000.

Las iniciativas postergadas se cuentan por decenas, pero, sin duda, que para el conjunto de los legisladores el proyecto de presupuesto 2003 es una de las mayores deudas El gobierno provincial lo envió a la Legislatura a finales de diciembre último, pero la Comisión de Hacienda, que conduce el ultrasobischista Eduardo Carbajo, se reunió en contadas ocasiones y, peor aún, lo trató en forma ocasional sin lograr consenso para pronunciarse sobre la proyeccción de gastos y egresos de la provincia. De hecho, el martes pasado sólo se presentaron a la convocatoria cinco diputados, cuatro de ellos de la oposición y sólo un representante del MPN.

El proyecto de presupuesto fija las prioridades y las pautas que debe adoptar el Poder Ejecutivo para manejar los recursos de la provincia. Pero como no está aprobado, el gobernador está conduciendo la ingeniería financiera de Neuquén con el presupuesto prorrogado de 2000 y con un decreto que promulgó a mediados del año pasado para modificar parte de la Ley de Administración Financiera y Control. Los diputados tampoco aprobaron los proyectos de 2001 y 2002, que el gobierno neuquino envió fuera de termino. Pero una vez que tenga mayoría propia podrá aprobar todos los ejercicios sin transpirar.

Las elecciones de 1999 privaron a Sobisch de una mayoría funcional porque el bloque de legisladores del MPN lo conformaron 16 diputados y no todos incondicionales al mandatario provincial. La oposición consiguió 19 bancas, pero lentamente se fue desgranando hasta quedar atomizada en seis representaciones parlamentarias Por eso, se abrirá un nuevo capítulo desde el próximo 10 de diciembre, cuando el oficialismo desembarque con por lo menos 23 diputados y con una oposición aún más fragmentada que con la que tuvo que confrontar hasta ahora. Tan sólo le faltará 1 voto para los dos tercios que le garanticen promover por ejemplo una ley de educación, la reforma Estado y de la Constitución Provincial, sobre todo, en cuanto al régimen económico para fortalecer la política de alianzas estratégicas y nombrar a los vocales para cubrir las vacantes del Tribunal Superior de Justicia.

Hay proyectos con cuatro años de espera

NEUQUEN (AN).- En las once comisiones que funcionan en la Legislatura provincial duermen decenas de proyectos de ley promovidos por la oposición, el oficialismo y el gobernador Jorge Sobisch que no vieron la luz en casi cuatro años de gestión.

El mandatario provincial dispuso retirar en abril pasado más de treinta proyectos que se quedaron atascados en las comisiones sin poder llegar al recinto para su aprobación, junto con las polémicas ternas con abogados vinculados al entorno del gobernador para cubrir tres vacantes en el Tribunal Superior de Justicia, que chocaron con la resistencia de la oposición El Poder Ejecutivo desistió de avanzar con los proyectos Chihuido II, de presupuesto de 2001 y 2002, de función pública y reforma del Estado que implicaba el despido de unos 3.500 empleados públicos, según la oposición. Además de la propuesta para derogar el artículo 62 y 80 que beneficia a los estatales, la municipalización del EPAS, proyectos de enmienda y de reforma de la Constitución Provincial, el convenio con Portugal y la empresa Erso por el ferrocarril Trasandino, que obligaba al estado neuquino a un desembolso de unos 50 millones de pesos para el emprendimiento, proyecto del Grupo MATAS que le otorgaba la provisión exclusiva durante 10 años de las raciones alimentarias que demandan los organismos oficiales.