Apenas asumió, Torres nombró a sus dos hijos

Es la concejal del PJ que reemplaza a Norma Miralles.

Cobrarán un sueldo superior a los 1.000 pesos, más un plus.

"A mi lado necesito gente de confianza", argumentó la concejal del justicialismo neuquino. Además de sus hijos, contrató a un militante.

NEUQUEN (AN) - La flamante concejal justicialista Nélida Torres, quien reemplazó a la renunciante Norma Amelia Miralles en el Concejo Deliberante neuquino, apenas asumió designó a dos de sus hijos en el equipo de colaboradores Figuran en el escalafón con categoría 24 y percibirán un sueldo superior a los 1.000 pesos, más plus, según admitió la legisladora "Los nombré porque a mi lado necesito tener gente de confianza, más cuando manejarán dinero. Además, ellos saben que parte de sus sueldos tendrán que distribuirlos a otras personas", comentó.

La llegada de Torres a la banca estuvo precedida de un complicado proceso, incluso judicial, ya que Miralles se resistió cuanto pudo a renunciar En tanto, ella pugnaba para que le dieran la banca y en su mensaje de asunción lo primero que hizo fue recriminar a su pares por "discriminación" y por los "15 meses de sinsabores y reclamos" que le hicieron pasar.

Torres, que se reivindica como una genuina militante de base, es empleada municipal y dice que si hubiera querido beneficiar a sus hijos con un trabajo, lo hubiera hecho mucho antes. Los jóvenes, Fernando Beroiza y Camilo Mena, según Torres, cobrarán 1.065 pesos -"están en categoría 24", dijo- más un plus. Otra fuente indicó que el sueldo supera los 1.700 pesos.

"El tercero es un militante del partido, Gerardo Montoya, y la verdad no sé cuánto cobrará, porque hay que hacerle el contrato", señaló Torres en su oficina.

Uno de los hijos de la concejal participó de la toma de un terreno, tiempo atrás, en reclamo de vivienda. "Pero se fue del lugar y ahora mis dos hijos viven en mi casa. Se las dejé y me fui a vivir con mi madre", explicó la edil.

Además de los mencionados, Torres dijo que hay otras cuatro personas colaborando con ella en el bloque, aunque aclaró que a titulo honorario.

Los concejales tienen dos posibilidades de designar empleados, se informó. Por un lado se trata de los empleados institucionales y por otro de los colaboradores del "bloque político" La práctica de designar a familiares como empleados, en forma directa o indirecta, es común (Ver recuadro) Nélida Torres comentó que sus hijos en este momento están desocupados.

-¿Cómo cree que la gente interpretará su actitud?, se le planteó.

"A lo mejor, como que acomodo a mi gente, pero no hay nada de eso. Mis hijos van a vivir como lo han hecho hasta ahora. La gente lo tomará como crea, pero los que me conocen saben que no estoy actuando mal. Le informo todo lo que me quiera pre

guntar, yo no tengo nada que ocultar", señaló. Añadió que "no sé cómo lo tomará la gente... Por ahí bien, por ahí mal".

Respecto de cómo es que sus hijos distribuirán parte de sus sueldos, dijo que efectivamente, lo destinarán para ayudar a "gente que no tiene ningún tipo de ayuda, ni plan ni 2128".

-¿Nombrar a sus hijos le significará pagar un costo ante la sociedad?.

"No sé si hay costo por pagar... Si yo me guardara la plata sí, pero yo no me guardo nada y por lo tanto no creo que haya costo por pagar", señaló.

Admitió que la función que asumió la expone ante el juicio de la sociedad, pero se expresó de tener convicciones firmes y la tranquilidad de actuar sin tener que esconder sus actos.

Esa vieja costumbre de contratar familiares

NEUQUEN (AN) - En las reparticiones públicas es común que se desempeñen familiares, directos o indirectos, amigos o allegados de funcionarios o ex funcionarios. El caso de la concejal Nélida Torres, que nombró a dos hijos como empleados del bloque del justicialismo, no es aislado ni mucho menos. Los propios ediles lo señalaron espontáneamente a "Río Negro" "En este momento en el Concejo Deliberante hay esposas, hijas e hijos de concejales trabajando. En algunos casos se trata de relaciones que no responden estrictamente a la condición de empleado, pero están cumpliendo una tarea", dijo una de las fuentes.

En clara actitud defensiva, una de las fuentes, que pidió reserva de su nombre, argumentó que "no es un fenómeno nuevo y si se trata de ponerlo a la luz, también debería mencionarse lo que pasa en la Legislatura, en el Palacio Municipal o en sus dependencias y en la administración provincial. Siempre existió esta práctica, sólo que ahora lo hacen más abiertamente".

En el caso de la Legislatura se reveló que se trata de empleados privilegiados, "no sólo por sueldos altos, a los que no estarían en condición de acceder en otros trabajos, mucho menos en empresas privadas, sino porque no cumplen con horarios ni obligaciones".