Lunes 20 de octubre de 2003

Críticas para el representante de EE. UU.

Noriega se molestó por visita oficial a Cuba y el gobierno respondió

El gobierno de Kirchner juzgó "muy desafortunadas" las recientes declaraciones del secretario de Asuntos Latinoamericanos de Estados Unidos, Roger Noriega, sobre la visita del canciller del país sudamericano a Cuba, declaró ayer el jefe de gabinete, Alberto Fernández La reacción argentina responde a expresiones de Noriega contrarias a que Buenos Aires conceda una quita de 75% en una antigua deuda de la isla y de "desilusión" porque el canciller Rafael Bielsa no recibió a líderes de la oposición al gobierno del presidente Fidel Castro durante su reciente visita a La Habana "Es insostenible esa posición. El canciller viajó en un rol oficial y para tratar temas económicos. No tiene nada que ver que en una visita de esa índole un funcionario se meta en los asuntos internos de otro país", dijo Fernández Los comentarios del funcionario de George W. Bush sobre la ausencia de contacto con la oposición cubana, involucraron también al presidente del Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien visitó Cuba antes que Bielsa En una audiencia de la Cámara de Representantes, Noriega señaló el jueves "con desilusión, que estos dos líderes latinoamericanos visitaron Cuba en los últimos dos meses y no se reunieron con los líderes de la oposición ni se pronunciaron públicamente sobre la represión del régimen de Castro" En cuanto a la negociación de la deuda de 1.900 millones de dólares que La Habana mantiene con Buenos Aires, Noriega expresó el viernes, en el Consejo de las Américas reunido en Nueva York, su objeción al pedido cubano de una quita de 75%, similar al que propone Argentina a sus acreedores privados "Me pregunto qué piensa el pueblo argentino sobre esto. También me pregunto qué piensa el pueblo venezolano sobre acuerdos como el que le da petróleo barato a Cuba", dijo Noriega "Esperamos -añadió el norteamericano- que este tipo de concesiones sea para gobiernos democráticamente elegidos, para que sus beneficios puedan llegar al pueblo y no a un régimen que mantiene a su pueblo en las cárceles" Consultado el jefe de gabinete argentino, dijo que estas palabras habían sido "muy desafortunadas" y también "muy antagónicas" con conceptos del nuevo embajador argentino en Buenos Aires, Lino Gutiérrez, vertidos la semana pasada en una visita al presidente Kirchner en la casa de Gobierno. "La Argentina pretende construir una relación madura con Estados Unidos, Cuba, los países del Mercosur y Europa. La postura del gobierno norteamericano no se entiende", añadió.

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