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"Consenso en Buenos Aires"

Coincidieron en vincular el pago de la deuda pública con la cuestión social. Firmaron acuerdos políticos, comerciales y para bloquear el tráfico ilícito de armas.

Kirchner y Lula suscribieron el documento llamado "Consenso de Buenos Aires". Allí se fija la posición conjunta de Argentina y Brasil ante el mundo.

Los presidentes de Argentina, Néstor Kirchner, y de Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva, se comprometieron ayer a fortalecer y ampliar el Mercosur, al advertir, entre otras cosas, que una "mayor autonomía" de la región permitirá enfrentar "más eficazmente" a los "movimientos desestabilizadores de capital financiero especulativo".

Afirmaron además que la administración de la deuda pública debe tener como horizonte la "creación de riqueza y puestos de trabajo, la protección del ahorro la reducción de la pobreza y el fomento de la educación", y ratificaron la intención de ambos países de participar "desde el Mercosur" en las negociaciones con el ALCA.

Lula y Kirchner mantuvieron un encuentro en privado en el primer día de la visita de Estado del mandatario brasileño, que volverá a su país mañana, después de una visita a El Calafate que realizará junto a Kirchner. Los dos presidentes firmaron acuerdos políticos y comerciales, entre otros, sobre Defensa de la Competencia y un memorando de entendimiento para crear una comisión de monitoreo que evite los diferendos comerciales.

Otro memorando buscará establecer un mecanismo de intercambio de información sobre la circulación y el tráfico ilícito de armas de fuego, municiones, explosivos y otros materiales relacionados. Luego de una reunión que se extendió casi una hora, Lula y Kirchner suscribieron en el salón Blanco de la Casa Rosada el documento denominado "Consenso de Buenos Aires", en el que se ratifica la voluntad de ambos gobiernos de fortalecer la integración latinoamericana.

"Los viejos moldes se han roto", sostuvo Kirchner tras firmar el documento, y agregó que los resultados prácticos del viejo orden mundial están a la vista. Por ello instó a "crear un nuevo orden internacional". El mandatario brasileño dijo en su discurso que Argentina y Brasil tienen "tamaño papel que jugar en el Mercosur y en las negociaciones con los organismos multilaterales, en la integración de Sudamérica y con la OMC y el ALCA". "Si estamos separados estaremos más frágiles frente al mundo", insistió.

Más tarde, y ante la Asamblea Legislativa reunida en su honor en el Congreso, Lula sostuvo que Brasil y la Argentina tienen que "asumir las responsabilidades de construir" una "gran región sudamericana" y actuar "como nunca, en todos los frentes de batalla", para conquistar "una ciudadanía plena" para su gente. Ante un recinto ocupado en un 80 por ciento, el mandatario brasileño tuvo un mensaje dirigido al fortalecimiento de la unión entre ambos países y destacó la importancia de las instituciones democráticas para afrontar los desafíos que se le plantean a la región.

Más temprano, en la mañana, Lula Da Silva estuvo en el monumento al general José de San Martín, donde colocó una ofrenda floral El 'Consenso de Buenos Aires' generó preocupación en el artífice del 'Consenso de Washington', el economista John Williamson, quien advirtió sobre el "riesgo de que Brasil se asocie con Argentina" cuando "el mercado de capital está muy enojado con los argentinos y feliz con los brasileños". (DyN y Reuters)

"Desilusión" de EE. UU. con Argentina y Brasil

WASHINGTON.- Estados Unidos expresó ayer su "desilusión" con Brasil y Argentina por su ambivalencia ante la represión ocurrida a principios de año en Cuba. El subsecretario para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, Roger Noriega, lamentó de que a pesar de que el presidente de Brasil, Lula da Silva, y el canciller argentino, Rafael Bielsa, visitaron Cuba en los últimos dos meses, no se reunieron con la oposición en la isla caribeña.

El funcionario, que compareció ante una subcomisión de Derechos Humanos y Bienestar Social de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, lamentó que ni Lula ni Bielsa hubieran condenado el arresto y posterior condena a largas sentencias de cárcel a 75 disidentes en la nación antillana.

"Desafortunadamente, las acciones, o la carencia de ellas, por oficiales brasileños y argentinos durante su visita a Cuba reflejan la ambivalencia de muchas naciones del Hemisferio Occidental a la reciente represión en Cuba", dijo Noriega en la audiencia sobre el embargo contra la isla.

"Debo anotar con desilusió que estos dos líderes latinoamericanos visitaron Cuba en los últimos dos meses y no se reunieron con los líderes de la oposición ni se pronunciaron públicamente sobre la represión del régimen de (Fidel) Castro", agregó Noriega.

Noriega calificó el hecho como "triste" y que "aparentemente ellos han dado la espalda a quienes están luchando en Cuba por sus derechos". El funcionario reiteró que el gobierno de Bush endurecerá el embargo contra el gobierno de Castro. (Reuters)

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