Viernes 3 de octubre de 2003 | ||||
Kirchner echó por irregularidades al jefe de la Federal Contrató dos empresas de familiares por $ 2 millones. La maniobra se hizo dos días antes de la asunción del presidente.
El presidente Néstor Kirchner echó ayer de su cargo al jefe de la Policía Federal, comisario general Roberto Giacomino, por haber contratado de manera irregular a dos empresas relacionadas con sus familiares que aportaron equipos de computación por casi dos millones de pesos. Según la investigación, la contratación realizada por Giacomino dos días antes de la asunción del presidente Néstor Kirchner fue efectuada con "elevados sobreprecios", y el jefe policial eludió un informe técnico que desaconsejaba ese negocio. Giacomino escuchó la novedad de manera telefónica por parte del propio ministro de Justicia, Gustavo Beliz, ya que se encontraba en la ciudad francesa de Lyon participando de un congreso de Interpol. Según fuentes de la fuerza, Giacomino se candidateaba para conducir esa policía internacional. Por el mismo caso, fue echado de la fuerza el Superintendente de Bienestar de la Policía Federal, comisario general Raúl Pigretti, por haber avalado con su firma la contratación realizada por su jefe Con esta medida, Giacomino se convirtió en el primer jefe de la Policía Federal en ser expulsado de la fuerza por un caso de corrupción. En otro escándalo policial, fue echado hace dos meses de la bonaerense el comisario general Alberto Sobrado, por otro presunto caso de enriquecimiento ilícito. Según se supo, aún no fue resuelto el reemplazante de Giacomino al frente de la Policía Federal. Ahora, el miembro de la cúpula policial con mayor jerarquía es el actual subjefe de la fuerza, comisario general Eduardo Prados Beliz aseguró que la denuncia sobre la contratación fue elevada a la Oficina Antocorrupción, la cual establecerá si corresponde una presentación penal que podría llevar a Giacomino a la cárcel. La destitución de Giacomino de su cargo se resolvió en pocas horas. Fuentes del ministerio de Justicia aseguraron que el caso comenzó el lunes de esta semana, cuando un particular alertó a Beliz sobre esa contratación de servicios y equipos informáticos por casi dos millones de pesos Según los voceros, en ese ins tante el ministro pidió el expediente para poder analizarlo. Así pasó todo el martes y el miércoles estudiando el caso y constatando las irregularidades En ese expediente consta un dictamen elaborado por asesores del ministerio de Justicia de la Nación, encabezado en ese entonces por Juan José Alvarez -hoy Secretario de Seguridad bonaerense- en el cual se desaconsejaba la contratación. "A pesar de esto, el comisario Giacomino, entre la salida de anterior gobierno y la asunción del actual, decidió avanzar en la contratación", dijo Beliz durante una conferencia de prensa ofrecida anoche en la Casa de Gobierno. Además, constató que "la contratación se realizó con elevados sobreprecios. El costo de los equipos, computadoras y cableados es como mínimo 400 mil pesos menor del valor que se pagó". También estableció que "con el dinero que se pagó por un alquiler de equipos por un año, se podría haber comprado definitivamente casi dos equipos similares al alquilado". El miércoles por la noche, el funcionario pidió una audiencia urgente con el presidente Néstor Kirchner y le expuso todos los informes sobre la contratación irregular de Giacomino y los actos de corrupción. "Hay que echarlo ya mismo", dijo el Presidente, palabras más palabras menos A las 5 de esta madrugada, el ministro Beliz se comunicó telefónicamente con Giacomino en Lyon y le dijo que estaba echado y que debía regresar inmediatamente al país, por lo que el hasta hoy jefe de la Policía Federal llegará en las próximas horas. Beliz aseguró que aún no tiene el nombre de quien reemplazará a Giacomino al frente de la Federal. "Nos vamos a tomar por lo menos una semana para analizar la situación, lo vamos a hacer con la resposabilidad de siempre", dijo el funcionario. Sin embargo, suena con fuerza el nombre de Pradós, un hombre por el que el presidente tiene predilección y que quiere al frente de la fuerza. La intención de Kirchner era colocarlo a la cabeza de la Federal en el inicio de su gestión, pero Giacomino tenía mucho apoyo en la fuerza y resistió. Igual, el ascenso de Pradós obligó al retiro de importantes comisarios que contaban con el total respaldo de Giacomino, mientras se estimaba que se abriría un compás de espera para relevar al jefe hacia fin de este año. Pradós reunía el perfil que Kirchner buscaba para comandar la fuerza: abogado, de 53 años, recibido en la Universidad de Buenos Aires, y hasta entonces a cargo de Planeamiento en la Federal, contaba además con el respaldo de algunas organizaciones defensoras de los derechos humanos. En aquel momento se especuló con la posibilidad de que el ex presidente Eduardo Duhalde habría pujado para dejarlo en el puesto. Probablemente la presencia sorpresiva ayer de Duhalde en la Casa de Gobierno acerca de la cual no hubo mayor información oficial, pudo haberse debido a la necesidad del Presidente, o del jefe de gabinete, Alberto Fernández, de comunicarle la decisión de relevar finalmente a Giacomino. El relevado jefe policial -quien trabajó en las custodias de vicepresidentes, como Víctor Martínez en la gestión de Raúl Alfonsín, y de Carlos Ruckauf, en el segundo mandato de Carlos Menem- era considerado como dueño de un excelente manejo de los policías "de calle" (DyN/Télam)
Llegó a durar tres mandatos La decisión del Gobierno de Néstor Kirchner de desplazar al comisario Roberto Giacomino de la jefatura de la Policía Federal puso fin a la larga carrera del uniformado, que llegó a permanecer en la conducción de esa fuerza durante el mandato de tres presidentes sucesivos. En 1983, Giacomino -a quienes sus conocidos suelen llamar "el dandy"- tomó contacto con el primer plano de la política nacional cuando fue destinado como custodio del ex vicepresidente radical Víctor Martínez. Desde ese cargo, el ahora ex jefe de la Policía Federal cimentó sólidas relaciones con dirigentes de la primera línea de los últimos gobiernos, como el ex presidente Eduardo Duhalde, el ex gobernador Carlos Ruckauf y el senador Eduardo Menem. De todos ellos fue custodio cuando les tocó presidir el Senado de la Nación durante la década del '90, cuando secundaban al entonces presidente Carlos Menem. Esas relaciones le sirvieron a Giacomino para acceder a lo más alto de la Policía Federal, cargo al que llegó a fines de 2001, durante la efímera gestión de Adolfo Rodríguez Saá y que mantuvo a pesar de sucesivos cambios de gobierno e, incluso, fuertes purgas en la cúpula de esa fuerza. El ex mandatario puntano lo eligió para conducir la Policía tras la escándalosa actuación de esa fuerza en los sucesos que se registraron en la Capital Federal el 20 de diciembre de 2001, que terminaron con seis muertos y el relevo del anterior jefe Rubén Santos Giacomino, quien venía de servir de custodio al entonces gobernador Ruckauf, sobrevivió a la caída de Rodríguez Saá, y luego acompañó a Duhalde en el año y medio que duró su gestión. Cuando Néstor Kirchner llegó a la presidencia de la Nación, el jefe policial -un partidario de la "mano dura" y de la necesidad de bajar la edad de imputabilidad para delincuentes- mantuvo su puesto a pesar de la fuerte purga dispuesta en las segundas líneas de esa institución. En ese entonces, el ministro de Justicia, Gustavo Beliz, que ayer fue el encargado de anunciar que Giacomino quedaba cesante, ejerció una fuerte defensa de su figura. Beliz había sostenido que el Gobierno buscaba colocar "gente honesta y eficaz" al frente de la Federal y que cerca de Kirchner mantenían "un buen concepto suyo". Ayer, las evidencias dieron por tierra con ese perfil.
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