Adentro, buen rock. Afuera, piñas

El festival musical en un colegio cipoleño se tornó tenso cuando varios jóvenes cruzaron golpes.

La vereda del colegio fue escenario de corridas y trompadas.

CIPOLLETTI (AC).- Algunos ni se enteraron, porque en el salón interno sonaba buen rock y los bailes improvisados de los asistentes eran seguidos por la atenta mirada de directivos, docentes y padres. Pero afuera del Instituto Fátima, y por espacio de varios minutos, una chispa hizo estallar la bronca, con corridas y trompadas que motivaron la presencia policial.

Lo bueno y lo malo tuvo su espacio el viernes por la noche en el salón de actos del instituto ubicado en calle Sarmiento, entre 9 de Julio e Yrigoyen.

Para darle contención a un segmento juvenil que a veces no encuentra muchos espacios para expresarse se programó una velada rockera, con jurado y todo, en el coqueto recinto de ese instituto religioso.

Allí estuvieron, desde las 20 del viernes, hasta casi la 1.30 de ayer, bandas como Precipicio, Fumate una Hormiga, Interfase, Oxígeno, Los Aberrojos, Bufones Cultos, Tempestad y La Curda, a la que le tocó la responsabilidad de cerrar la velada, con estilo "tranqui", y cumplió, de acuerdo al relato de algunos presentes.

La gente bailaba adentro, no se vendía alcohol, sólo fumaban unos pocos y los chicos y chicas del colegio tenían un bufet que hizo su agosto, con agua, gaseosas, sandwiches, y otras variantes culinarias, dulces y saladas. Todo muy "light.

Sin embargo, no todo fue bonanza En el exterior del colegio había jóvenes esperando a sus bandas y de un momento a otro los ánimos subieron de temperatura No hubo un testimonio concreto sobre los motivos que dieron origen al lío, pero de pronto comenzaron las corridas, trompadas, los golpes con "bates" improvisados, los gritos y los insultos. Dicen algunos que el punto de la primera contienda fue a dos cuadras, en la esquina del Círculo Italiano, y que la disparada de unos llevó a los demás hacia el Fátima.

Allí se terminó de descargar la bronca entre todos, los que llegaban y los que estaban aguardando la salida de los suyos.

Desde el instituto se dijo oficialmente que el festival se desarrolló en un clima de fiesta y que ese tipo de encuentro sirvió para que chicas y chicos compartan su placer por la música "y para que los adultos conozcamos y apreciemos esta cultura que no nos puede ser ajena y sirve para crear una comunicación generacional indispensable para ponerle a estos tiempos un signo de comprensión y solidaridad".

Sobre el combate externo, ninguna expresión De todas maneras, varios testigos aseguraron que la tensión duró largos minutos y sólo bajó de decibeles cuando llegó la policía.

A pesar de todo, no hizo falta llevar detenido a ninguno de los revoltosos.