Etapa final del juicio contra ex gerente y una gestora

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Tanto el abogado querellante como el fiscal Federal, solicitaron una pena de 2 años y medio de prisión para el ex gerente de la sucursal local del Banco Nación y para una gestora, por presunta administración fraudulenta de los fondos públicos, en el caso del funcionario, y como partícipe primaria y necesaria, en el caso de la mujer. Para el ex gerente, además, el fiscal solicitó la inhabilitación absoluta y perpetua para ocupar cargos públicos.

A raíz de la denuncia formulada por un empleado del Banco, el 28 de junio de 1999 el juez Federal Leónidas Moldes ordenó allanar la casa de la gestora Laura Russo y la sucursal local del Banco de la Nación Argentina, a cargo de Omar Radelland, porque sospechaba que ambos actuaban en connivencia para otorgar créditos a personas que no reunían los requisitos normalizados por el Banco. Antes y después, el magistrado intervino los teléfonos de los sospechosos y registró conversaciones que a juicio del fiscal son comprometedoras para ambos.

Durante los meses anteriores a la denuncia, la gestora, actuando con representación gremial, preparó las carpetas de decenas de aspirantes a créditos personales, y estaría probado que, en algunos casos, los buenos oficios de la gestora ante Radelland permitieron hacer viables algunos créditos que antes habían sido rechazados por el personal del banco.

El querellante Sergio Barzola expuso que "el 88 por ciento de los créditos otorgados son incobrables", y que Radelland había flexibilizado normas en su afán de ser "un gerente dinámico". Agregó que no le constaba que se hubiera quedado con dinero, "pero sí Russo y los beneficiarios de los créditos", y que su conducta superaba la omisión. Con esa postura, en todos sus términos, coincidió el fiscal Federal Mario Sabas Herrera, al asegurar que "con 30 años de experiencia, Radelland sabía que esos créditos no se iban a cobrar, pero trataba de favorecer el ánimo de lucro de Laura Russo".