Fuga masiva en Roca con la ayuda de otros detenidos

Quince presos lograron escalar el muro en una aceitada maniobra.

Otros 50 internos cubrieron la evasión apedreando a los guardias.

Un policía está herido. Lograron recapturar a siete de los evadidos.

A la superpoblación carcelaria en Roca se suma la falta de personal policial, por lo que las fugas suelen ser moneda corriente.

ROCA (AR).- La evasión más importante de los últimos tiempos, se registró ayer en la alcaidía de Roca, luego de que 15 presos lograran escalar el muro y ganar la calle. Todo pareció ser una maniobra más que aceitada, porque otros 50 internos apedrearon las garitas de los guardias que están sobre el muro, para cubrir el escape sin que los evadidos puedan ser alcanzados por los disparos con balas de goma.

La pedrada no sólo que consiguió el objetivo de permitir a los evadidos llegar rápidamente al muro, sino que además dejó a un policía con heridas debido a los piedrazos sufridos.

Anoche a las 20.45, finalizó el recuento de internos en la alcaidía, por lo que se confirmó que fueron 15 los que se fugaron, y que hasta anoche quedaban ocho prófugos.

Dos ellos son de Roca y los restantes de la zona de Cipolletti. Anoche, todas las unidades del Alto Valle buscaban a Sergio Cabeza, Pablo Martín Luna, Héctor Rafael Leiva, Jorge Villegas, Alberto Velázquez, Ramón Llanquinao, Miguel Angel Cirer y Néstor Garrido, los ocho presos que seguían en libertad.

La fuga se produjo ayer alrededor de las 15.30. Entre 25 y 40 presos comenzaron a forzar una gran reja que comunica a los pabellones con el patio interno de la alcaidía roquense. Fue tal la fuerza que hicieron, que los dos candados que la sujetaban se rompieron.

Rápidamente, cerca de medio centenar de detenidos comenzaron a lanzar una verdadera lluvia de piedras contra los guardias que estaban sobre el muro.

Esta situación fue aprovechada por los 15 reclusos, que munidos de ganchos con sogas y escaleras de fabricación casera, corrieron hasta el muro oeste de la cárcel.

Con los implementos fabricados, lograron rápidamente escapar, mientras que se daba la voz de alerta, y desde la cárcel se pedían refuerzos urgentes al resto de las unidades ante semejante escape.

El operativo se montó de inmediato, por lo que con el correr de las horas se recapturaron a algunos de los fugados. Pero la situación tampoco fue sencilla.

En uno de los procedimientos que se realizó en barrio Tiro Federal, un patrullero de la comisaría 31 fue blanco de los piedrazos que lanzaban algunos vecinos, quienes a toda costa intentaban evitar las detenciones.

El resultado fue un móvil con su luneta destrozada y dos presos recapturados Más grave aún fue el ataque por parte de desconocidos contra otro patrullero de esa misma unidad, que resultó con la carrocería perforada por disparos de armas de fuego de distintos calibres.

Lo que los investigadores creen, es que la fuga estaba planeada de antemano, y que tal vez iba a ser más numerosa. Sin embargo, una requisa realizada el sábado obligó a los presos a un urgente cambio de planes.

Es que en el sector de la cocina, el sábado a las 8.40 se detectó que un barrote había sido cortado, y también se halló la boca de un túnel que había sido construido en dirección norte. De haberse finalizado la construcción del mismo, fuentes policiales indicaron que seguramente el número de prófugos iba a superar la treintena.