Tratan de establecer si los apremios eran habituales

Cada vez más comprometida sería la situación de varios policías de la Comisaría 34 de Viedma. Incluso, en las próximas horas se producirían algunas detenciones. Investigarán a fondo.

Al parecer, en la Comisaría 34 las irregularidades no serían aisladas. Quieren establecer cómo era el trato a los detenidos.

VIEDMA (AV)- En los próximos días podrían ser detenidos varios policías por los presuntos apremios ilegales en la comisaría N 34 de Viedma. En tanto, la línea de investigación no descarta la posibilidad que en esa dependencia se hayan utilizado elementos que puedan ser vinculados con la tortura. Aunque la sola exhibición del arma reglamentaria como elemento amenazante ya es una actitud de tortura psicológica hacia la víctima.

Por otra parte, este hecho podría generar una investigación más profunda sobre el accionar en la comisaría del barrio 20 de Junio ante la posibilidad que el apremio ilegal haya sido una práctica habitual con la gravedad que ello significa. De ser ampliada la investigación en este sentido, se complicaría aún más la situación de quienes condujeron esa dependencia hoy intervenida.

Además trascendió que esta comisaría habría "estado en la mira" de la Jefatura de la Policía por su accionar, razón por la cual la orden de la investigación interna sería "llegar hasta el fondo" de la cuestión.

Ayer el juez penal Jorge Bustamante siguió tomando declaraciones testimoniales y ordenó una serie de pericias. Admitió que la semana próxima tomará alguna decisión respecto de los hechos que se investigan y de las personas involucradas.

Consultado sobre los trascendidos que indican que en esa dependencia policial se haya aplicado algún sistema de tortura, el magistrado se limitó a responder que "en estos momentos no puedo tipificar los hechos, es decir, qué tipo de delitos podría constituir lo que hoy investigamos". No obstante admitió que se investigan actos probables de violencia sobre niños que habrían estado demorados en esa comisaría.

Hasta ayer habían declarado sólo cuatro de los uniformados que se encontraban en la comisaría la noche de los hechos. Aún no fueron citados los policías que se encontraban en una de las oficinas de la dependencia junto al joven de 15 años que habían detenido y que estaba tirado en el piso, esposado con las manos hacia atrás, des

calzo y con la cabeza cubierta. Estos efectivos serían cinco y los más complicados en esta causa. No han sido convocados aún a declarar porque serían citados directamente a indagatorias.

Tampoco declararon hasta ayer, los exjefes de la unidad el comisario Enrique Bais, el subcomisario Adalberto Cravotta y el oficial Norberto López.

Pasadas las 22 del lunes y luego de ser informado sobre la detención de dos menores de 15 y 16 años sospechados de protagonizar el robo de un par de zapatillas y de un equipo Sega, Fabio Igoldi -secretario del juez penal Jorge Bustamante- se presentó en la comisaría 34 del barrio 20 de Junio de Viedma.

Antes habría ordenado el traslado de los jóvenes a la comisaría Primera con la presencia de una persona de Promoción Familiar. Cuando el funcionario ingresó a la dependencia para verificar si se había cumplido con la disposición dispuesta, se encontró