Vuelven a juzgar al policía tras la polémica firma

Ayer se inició el juicio por la muerte de la ex novia de Víctor Verbeke. El uniformado había sido absuelto, pero la firma de un juez que había renunciado obligó a realizar un nuevo juicio.

El camarista Sánchez Freytes y el forense Rodolfo Scatena realizan la reconstrucción de la posición del arma en los disparos.

ROCA (AR).- Víctor Verbeke, el policía que había sido absuelto por la muerte de su ex novia Silvana Barra, comenzó a ser juzgado ayer nuevamente por el mismo caso, luego de que la Corte Suprema de Justicia anulara la sentencia dictada el 8 de febrero de 2000, por la firma de uno de los jueces que siete días antes había renunciado a su cargo.

Diez testigos desfilaron ayer ante el Tribunal presidido por Fernando Sánchez Freytes, y subrogado en las vocalías por Juan Torres y César López Meyer.

Los testimonios no fueron determinantes para definir si Verbeke tuvo responsabilidad o no en la muerte de Barra, quien murió de dos disparos de su arma reglamentaria. Uno en la cabeza, que le voló parte de la masa encefálica, y el restante con orificio de entrada y salida en el hombro derecho.

Sin embargo, tanto el defensor Oscar Pandolfi como el querellante Eves Tejeda, plantearon sus argumentos sobre el desacuerdo o no de la decisión de la Corte Suprema de realizar nuevamente el juicio.

Pandolfi hizo reserva para llegar a la Corte Interamericana de Justicia, "porque lesiona groseramente los derechos de mi cliente".

Expresó su disconformidad con el nuevo juicio, al señalar que "no se cuestionan las actas, sino una firma. Y ese error administrativo se hubiera podido subsanar. Mi cliente fue encarcelado 11 meses, juzgado y absuelto por unanimidad. Verbeke no tuvo la culpa de un error administrativo. Además -indicó- la sentencia fue unánime. No se trata del voto que decidió la absolución". Para finalizar, graficó la situación de su defendido como "una persecución penal".

Luego fue el turno del querellante Tejeda, que lógicamente defendió la decisión del nuevo juicio. "No se trata de un error formal. El acta de sentencia es inexistente, porque a la fecha de la firma Rafael de la Rosa ya no era juez. Los otros dos jueces se adhieren a un voto que no existe, que no tiene validez jurídica".

El querellante se opuso también a incorporar los testimonios por lectura "por haber un tribunal distinto al del juicio anterior".

Ayer declararon Patrici Chandía, madre de la víctima, quien dijo que su hija era una muchacha alegre, con proyectos y aseguró que no tenía motivos para suicidarse; los peritos Claudio Schoua, Rodolfo Scatena e Ismael Hamdan, quienes coincidieron en que el disparo en el hombro no fue autoprovocado, es decir que necesitó de un tercero que en el forcejeo jalara el gatillo; los peritos balísticos Oscar Méndez y José Jerez; el armero Ubaldo Arino; Norma Torres y Juan Ramón Pereyra, vecinos de Verbeke, quienes aseguraron que el acusado estaba "desesperado y bajo una crisis nerviosa al momento del hecho"; y finalmente Luciano Verbeke, hermano de la víctima, quien relató la buena relación que había entre su familia y Silvana Barra, y dio a entender algunos problemas entre la víctima y su propia familia.

También aseguró que por

El juicio continuará el 17 de octubre con la declaración de los restantes nueve testigos.

Según el tiempo que insuman las declaraciones, en esa misma jornada se podrían realizar los alegatos de las partes.