Homenaje a un médico con medio siglo de oficio

Tadevsz Maminski lleva 50 años ejerciendo la medicina. Sus compañeros del López Lima, familiares y amigos lo agasajaron por su trayectoria. Vive y trabaja en Roca hace 28 años.

Maminski fue agasajado por sus compañeros de trabajo, familiares y amigos, en el hospital López Lima, donde trabaja.

ROCA (AR).- Ayer por la mañana, los médicos del Hospital Francisco López Lima de Roca, amigos y familia, brindaron un homenaje a Tadevsz Maminski en el aniversario de sus 50 años en la medicina.

Nació en Polonia, tiene 75 años y vive en Roca desde hace 28 En un modo particularmente marcado por tres idiomas (polaco, francés y castellano), tiene muchas cosas por decir, por recordar Ayer por la mañana, en un día como tantos otros, participaba de una junta médica desde las 9. En un momento, dos colegas lo fueron a buscar para que viera "la nueva camilla". Totalmente confiado, los acompañó. El piadoso engaño tenía que ver con el agasajo sorpresa que le habían preparado sus compañeros y su familia. Cumplió 50 años de trabajo, 50 años de entrega y 50 años de servicio. "Ustedes me ayudaron, gracias", respondió.

Nació en el año 1928, en Polonia. "En la Segunda Guerra Mundial, los nazis mataron a una gran cantidad de los intelectuales de Polonia. Para suplir la ausencia de médicos, mi generación de estudiantes se recibió inmediatamente, sin prácticas", relata. Fue por eso que, durante su primer mes de trabajo, prácticamente vivió en la sala de guardias. "De esa forma, en 30 días hice la residencia de un año", simplifica.

Las estadísticas de Maminski impresionan: 156.706 pacientes atendidos en consultorio, 16.580 prácticas traumatológicas y quirúrgicas.

"Mi primera paciente real fue una chica de 16 años. Estaba embarazada y había tomado quinina, pensando que esto la haría abortar. Estuve toda la noche realizando lavajes para salvarla. Felizmente, se salvó", cuenta Luego de una especialización en traumatología, pudo viajar a trabajar a Túnez. Allí se contactó con petroleros que habían estado en la Argentina y le contaron como era el país "Llegué a Buenos Aires en el año 1974 y lo primero que hice fue revalidar el título". En esos primeros tiempos, vivió una experiencia, hoy increíble, y la revive de esta manera: "Estaba como ayudante de cirugía en el hospital Güemes y, en la sala de descanso, escucho que alguien habla en francés. Empecé a charlar con ellos y eran de l televisión francesa, registrando la técnica del bypass. En un momento me tocan la espalda, me doy vuelta, y un médico me preguntó quién era. Le conté mi historia y me consultó si tenía experiencia en cirugía de corazón. Le comenté que había operado a corazón abierto a un joven apuñalado, pero que no recordaba haber estudiado específicamente sobre el tema, ya que lo mío era la traumatología. Asombrado, me ofreció trabajar en su equipo. Lo pensé y no quise dejar mi especialidad". Unos meses después, Maminski llegó a Roca. Había rechazado, gentilmente, integrar el equipo de operaciones del doctor René Favaloro. "No me arrepiento, en Roca encontré todo lo que esperaba para mi trabajo. Principalmente, mucho amor", afirma.

"Yo siempre digo algo: en una batalla, hay soldados de primera y segunda línea. Nosotros, en el hospital, somos soldados de primera línea. En los problemas, donde la gente necesita que la ayude, allí estamos. Otra cosa es perder el tiempo" reflexiona finalmente este médico argentino.