Inversores ponen la lupa sobre Kimar

Con las cuentas reordenadas, hubo dos ofertas por el súper de Roca.

ROCA (AR).- Las cuentas de Kimar se ordenan y atraen inversores. "Estamos en una etapa de franca recuperación, y en poco tiempo se podrá levantar totalmente la convocatoria de acreedores", afirmó René Boggetti, titular de la cadena de supermercados de Roca. El empresario confirmó que el presente de la firma sedujo al menos a dos grupos, con las que actualmente se está desarrollando una etapa de conversaciones.

"Estamos abiertos negociar. Tenemos algunos interesados, pero hasta ahora no han realizado ninguna oferta concreta", afirmó Boggetti en relación a una posible venta Igualmente, aclaró que "en caso de buscar algún tipo de acuerdo comercial, optaríamos por el alquiler del local grande de Tucumán 1330" "El tema es que si se realiza una buena oferta de compra, no la podríamos rechazar", agregó Boggetti.

En las últimas semanas, los rumores por la venta de Kimar cobraron fuerza a partir de un ofrecimiento de una cooperativa de Bahía Blanca Boggetti no negó las negociaciones, pero explicó que en esta etapa, "sólo se puede hablar de conversaciones".

"No hay nada definido y en estos casos, son los números los que mandan", sostuvo. El responsable de Kimar aseguró que en los últimos tiempos se acercó también un grupo inversor de Buenos Aires, que estaba interesado en la compra del local principal Las alternativas que manejan en la empresa son dos: vender o alquilar. La segunda opción es la que más los seduce, ya que les posibilitaría llevar adelante el resto del plan: extenderse a los barrios De esta manera, Kimar estaría repitiendo el sistema que permitió a otros supermercados con capitales locales sobrevivir a la instalación de las grandes cadenas.

Cabe recordar que la empresa cayó en cesación de pagos en febrero de 2002, cuando no pudo hacer frente a las obligaciones previsionales de la planta de personal. Con un pasivo que aumentaba año tras año y con una caída en las ventas que orilló el 50 por ciento, finalmente se abrió el concurso de acreedores.

A partir de esa caída surgió la cooperativa "Quilla Hué", que reunió a los trabajadores del patio de comidas. Los empleados del comedor del supermercado se asociaron en el emprendimiento y lograron salir adelante, creando incluso más tarde su propia marca de pastas.

Kimar contiene a más de 100 empleados y es una de las tantas empresas locales que sufrió las consecuencias de la crisis de 2001, además de tener que afrontar la guerra de precios y oferta que proponen continuamente las cadenas de supermercados nacionales o extranjeras que se instalaron en la región durante los últimos años.