Timoteo, de regreso, avivó la hoguera del diablo

Griguol debutó y Gimnasia sumó su primer triunfo ante Independiente.

A Manso le costó encontrarse con la pelota y el "Rojo" lo sufrió.

Fue como empezar de nuevo un campeonato. En un banco, Osvaldo "Chiche" Sosa, DT de Independiente cumpliendo su segundo partido al frente del equipo; en el otro, Carlos Timoteo Griguol debutando en la décima fecha del Apertura como entrenador de Gimnasia.

Difícil era imaginar, entonces, un partido de equipos atrevidos y seguros de sí mismos. Y la realidad no hizo más que confirmar esa predicción: los dos salieron a asegurar la pelota y tratar de no cometer errores Sin embargo, hubo uno que se animó un poco más y logró el único gol de la noche. Fue el "Lobo", que de esta manera sumó su primer triunfo en el certamen y, al menos de manera transitoria, dejó la penúltima posición. Ahora suma 7 puntos y debajo quedaron Chicago (5) y Olimpo (3).

El "rojo", por su parte, sigue sin sumar y deambula por la mitad de la tabla con 13 unidades.

El partido se hizo monótono y aburrido en el arranque. El "Lobo" atacaba con muy poca gente y el local no agarraba la pelota: a Manso le costó entrar en juego como volante izquierdo.

En el segundo tiempo, de entrada nomás, Independiente mostró un cambio d actitud. A los dos minutos Olave mandó al córner un buen cabezazo a Bruno Marioni. Y en el tiro de esquina, el arquero "tripero" sacó una pelota increíble, con el pie izquierdo en la línea del arco, otra vez al delantero rojo El avance del local impulsó también al equipo de Griguol y a los ocho minutos, los muchachos de Don Timoteo se pusieron en ventaja. Luis Rueda cortó una racha de cuatro partidos sin marcar al aprovechar desde el borde del área chica un muy buen desborde y centro de Litch Otra vez en desventaja, "Chiche" Sosa puso toda la carne al asador (entraron Rivas, Calderón y Ríos), pero apenas tuvo un par de chances de empatar. De cabeza, como en el comienzo del complemento, lo tuvo el "Rojo" cuando el chileno Rafael Olarra ganó en un córner y sacó un potente cabezazo que, como los otros, encontró buena respuesta en Olave En la última, a Cagiano se le ahogó el 1-1. Rivas desbordó y asistió al joven delantero, que desde el piso desvió la pelota dejando sin chances a Olave. Palo Gimnasia aguantó la diferencia y logró su primer triunfo. Como para que los 3.000 hinchas que recibieron a Timoteo en Estancia Chica y los otros tantos que llegaron hasta Avellaneda lo quieran, todavía, un poco más.