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Fútbol de AFA

Un Tévez genial no pudo evitar que Boca resignara dos puntos en su cancha

Ganaba dos veces, con goles de su crack. Bánfield, muy contudente, lo dio vuelta. Battaglia marcó el empate final cuando faltaban siete minutos. Boca lleva 3 puntos.

Tévez, siempre impredecible, se apresta a eludir a Noce, para luego definir de zurda con ángulo cerrado. Fue el 2 a 1 parcial.

Ya desde el hecho de que haya sido un partido de la cuarta fecha jugado en la mitad del torneo, pasando por el principio acelerado y ese final que prendió fuego a los espectadores, por donde se lo mire el empate entre Boca y Bánfield de ayer en la Bombonera fue raro, como encendido. Tuvo seis goles y muchos condimentos que divierten al público y hacen del fútbol un deporte inigualable.

Todo porque Boca, acostumbrado a trabajar los partidos y ganarlos generalmente en los segundos tiempos, se encontró con un gol desde el vestuario. A los 7 minutos Estévez encaró por derecha, se metió en el área y sacó un fuerte remate cruzado. Noce dio rebote y el enorme Tévez, al acecho, la empujó al gol.

Todo hacía suponer que Boca manejaría el partido y se llevaría los tres puntos. El estadio estallaba, Tévez era incontrolable para los defensores y Bánfield quería avanzar pero no sabía cómo. Con más ganas que inteligencia, los delanteros del "Taladro" chocaban con Schiavi y Burdisso.

Entonces se esperaba el segundo de Boca. Estévez, Iarley y Tévez alternaban y rotaban sus posiciones, pero les faltaba precisión, sobre todo al brasileño. Encima Bánfield perdió a Vilos, su mejor jugador hasta ese momento. En su reemplazo entró el ex jugador de River Juan Pablo Raponi. Para él también sería curioso el desarrollo del partido.

En el comienzo de la segunda parte el equipo de Falcioni tuvo la intención de apurar a Boca. Bianchi sacó a Iarley en el descanso y metió a Villarreal por derecha. Así, el equipo quedaba plantado con cuatro volantes de características defensivas: Villarreal, Cascini, Battaglia y Cagna. Todo listo para la contra con Tévez y Estévez, muy rápidos. Pero no. Boca empezó a controlar la pelota, tocaba y llegaba por los costados. Tévez manejaba la batuta, Battaglia se sumaba al juego por abajo y Estévez desbordaba. De pronto, en una contra de Bánfield a los 12 minutos, Schiavi le cometió falta a Cervera en el borde del área y Raponi avisó con un tiro libre que pasó al lado del palo. Un sobresalto nada más, pensaron los de Boca. Pero no. A los 21 minutos un centro pasado cayó en los pies de Raponi, Villarreal lo miró, Abbondanzieri también, y el ex River, con muy poco ángulo, empató con un zapatazo al primer palo.

Boca reaccionó enseguida con dos nuevas situaciones que Noce resolvió muy bien. Primero le tapó con los pies un mano a mano a Tévez y luego un cabezazo cruzado de Estévez. Hasta el segundo: el ex San Lorenzo arrancó una vez más por derecha, eludió a dos rivales y asistió a Tévez. El crack desairó a Noce y puso el

Bianchi puso a Cángele. Estaba furioso. Un centro de Jerez fue cabeceado por Battaglia. La pelota se colgó en el ángulo Sólo quedaba tiempo para una más. El mejor de la cancha, Tévez, recibió en área, se deshizo de un rival y remató fuerte. Era gol del triunfo en el último minuto. Pero no. El tiro dio en el travesaño. Increíble. Como todo ese segundo tiempo que sacudió las ajadas bandejas de la Bombonera  

Juan Ignacio Pereyra (ABA)

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