Desde el cristal de las miradas

Maximiliano Guerra y el Ballet del Mercosur danzan en San Martín de los Andes.

Gemas y seduccio-nes entre el clásico indubitable y el moderno pincelado de identidad.

NEUQUEN (AN).- Las miradas y sus cristales Hay quien siente que "Raymonda" (Grand Pas Hongrois), con música de Alexander Glazunov y coreografía de Mario Galizzi, fue lo máximo de la noche, dentro de un estilo indubitablemente clásico Otros dieron fe que "Bailantas", con música de Gilberto Monteiro y los hermanos Barboza, obra en base a chamamés y folclore estilizado, era la perla del programa, al que se vitoreó con largueza

Entre las zapatillas de punta, el tutú y unos chiripaes superpuestos y "bota e potro" en las chicas... entre uno y otro digamos, viró Maximiliano Guerra y el Ballet del Mercosur gozando placenteramente, sin diferencias ni medias tintas. Fue el miércoles a la noche en el cine Español ante unas 500 almas.

Hoy y mañana, a las 21.30, la compañía y el Maestro estarán en una sala especialmente acondicionada, en el gimnasio del colegio Fasta de San Martín de los Andes.

Si los cordilleranos se preguntan ¿valdrá la alegría verlos?, sí, podrán salir más o menos conformes según sus propias expectativas. Hay que estar abiertos y dejarse sorprender (o enojar si se va con ganas de ver un género y se encuentra con una gama).

Este espectáculo es un "Clásico@Moderno" sin vueltas, desde su nombre hasta en su contenido. Aquí está presente lo puro o mixturado de cada género en las obras. Mejor: ni tan puro ni absolutamente mezclado que se disfume en el intento En vías de elegir (subjetivamente claro), Maximiliano y Mariana Antenucci maravillaron con ese "Adagietto" con música de Gustav Mahler y coreografía y vestuario de Oscar Araiz. La sutileza interpretativa, el delicioso acompañamiento amoroso, con singulares estados de elevación y sincronía, con ligazones y entendimientos entre ambos, apasionó a muchísimos.

Otro impacto muy fuerte, fue "Arms" con un Guerra solo, fuerte, ciclópeo, métrico, laberíntico, por momentos con ondulaciones de danzarina oriental y de sierpe, de luchador greco y físicoculturista, de misterio y fascinación. Regia esta interpretación de la coreografía de Mauro Bigonzetti y música de VAS.

¿Algo bello?

Belleza, talento, exquisités. emoción que llena el alma en "Entre dos abrazos" el estreno mundial. Lástima que el programa no trae los nombres de los bailarines, magnífica ella y a su altura los dos varones. Una gema.

Si hay un punto para enaltecer en este enorme proyecto de Guerra, es el rescate de los ritmos argentinos, pincelando con expresiones de nuestra idiosincrasia. Más que el tango mirando al sur. Mucho más, lo demás. Talentos del Cono Sur.

Beatriz Sciutto