Daños irreparables en el mítico chalé de Victoria Ocampo

BUENOS AIRES (DyN/Télam)- El mítico chalé que la escritora Victoria Ocampo ocupó en la localidad bonaerense de Béccar, en San Isidro, y que a su muerte en 1979 pasó a manos de la Unesco, se incendió anoche, sin que se produjeran víctimas pero sí daños materiales y culturales irreparables.

El siniestro comenzó pasadas las 20 y rápidamente se extendió a la mayor parte del casco de la finca, de unos 1.800 metros cuadrados, por lo que fue necesaria la intervención de al menos una quincena de dotaciones de bomberos de ese partido del norte del conurbano y de localidades aledañas.

La "Villa Ocampo", que está ubicada en la calle Elortondo 1811, a la altura de la avenida del Libertador al 17.500, al momento del siniestro estaba seriamente deteriorada y abandonada, aunque circulaban versiones de que libros pertenecientes a su biblioteca eran vendidos en el mercado electrónico, según denunció el escritor y cineasta Edgardo Cozarinsky, el año pasado.

Cerca de esta medianoche, los bomberos que intervenían en el siniestro habían controlado las llamas, que habrían alcanzado, incluso, la biblioteca de la familia Ocampo, situada en el primer piso de la mansión.

De todos modos, el personal de Bomberos, de la Policía Bonaerense y de la Dirección de Defensa Civil de la provincia confirmaron que no se habían producido víctimas por el siniestro, aunque sí daños irreparables en gran parte de la mítica finca.

La casa fue construida por el padre de la fundadora de la Revista Sur en 1891, cuenta con una superficie total de 1.821 metros cuadrados y está rodeada por un parque de 11.200 metros cuadrados, sobre las barrancas de San Isidro, y orientada al río de la Plata.

La escritora decidió donar el chalé, conocido como "Villa Ocampo", a la Unesco en 1973, con el objetivo de que fuera utilizado para la investigación y desarrollo de actividades culturales, artísticas y científicas, y se hizo efectiva en 1979, tras su muerte.

Al momento del incendio, del cual los bomberos no habían podido determinar su origen, la vivienda estaba seriamente dañada, debido a disputas entre herederos, familiares y amigos de la escritora, directivos de la Secretaría de Cultura y de la Unesco que impedían su remodelación.

Por esa vivienda pasaron las principales figuras de las letras nacionales, como su hermana Silvina, Jorge Luis Borges, Adolfo Bioy Casares, Oliverio Girondo y Leopoldo Marechal, y del exterior, como Albert Camus, Roger Callois, A. W. Laurence y el compositor Igor Strawinsky, entre otros.