Domingo 7 de setiembre de 2003

Se juntaron para construir las casas de chicos discapacitados

Participaron del proyecto estudiantes de un colegio de Buenos Aires

ROCA (AR).- Con el solo objetivo de dar una mano y casi sin pensar en los 1.200 kilómetros de distancia ni en los pocos recursos con los que cuentan, un grupo de estudiantes del Colegio "El Salvador" de Buenos Aires se acercó hasta Barrio Nuevo de esta localidad para ayudar a construir la casa Horacio.

En un proyecto solidario que tiene lugar en la ciudad por tercera vez, participan tres actores: el Colegio Salvador de Buenos Aires, la Escuela Especial 1 de Roca y la organización "Un techo para mi hermano". Esta última fue el nexo entre un proyecto de taller de albañilería de la escuela roquense y el colegio católico de Capital Federal, que año tras año desde 1997, viaja a Río Negro con un grupo de adolescentes con el único objetivo de "colaborar para que la vida sea un poco mejor para todos".

Los trece jóvenes están acompañados por el padre Rafael Velazco, rector del colegio; Diego Giovanetti, novicio; y Juan Cruz Gaggero, profesor de la institución. Todos ellos se acercaron, durante una semana, todas las mañanas y las tardes a trabajar a las casas de dos chicos que asisten a la escuela La selección de los casos de las familias Luna y Collio -para quienes se construyeron las casas- tuvo que ver con el inicio del taller de albañilería de la "especial 1". Aprobado para la escuela de Roca a principios de año, el objetivo era, al tiempo que se aprendía una actividad distinta y productiva, integrar a los alumnos a la comunidad y brindar un servicio.

El proyecto se retrasó por razones burocráticas, ajenas al establecimiento. "Asignaron a la docente para el área pero hubo un error y esta persona no tenía los conocimientos orientados a la construcción. Lamentablemente enfermó y se integró otro profesor que se puso al frente de la iniciativa", explicó Fabiola Santarelli, psicopedagoga de la institución "El problema consistía en que teníamos a los chicos para enseñarles, contábamos con el docente, pero no teníamos los recursos. Ahí nos contactó la arquitecta Inés Pérez que nos impulsó a realizar una campaña solidaria - "Somos capaces de construir solidaridad"- con la que aún hoy seguimos juntando materiales, porque la idea es seguir ayudando y aprendiendo", sostuvo.

Una de las construcciones que se realizaron fue la casa para la familia de Diego Collio, en Barrio Nuevo. Horacio, padre de este chico de 10 años, trabajó a la par de los adolescentes. Todos los días prepararon la mezcla y pegaron ladrillo por ladrillo. Si bien los estudiantes porteños ya partieron de vuelta a su ciudad, desde la escuela seguirán apoyando a Horacio para terminar la casa que suplante a aquella construcción de barro que se derrumbó hace casi dos años. "La verdad, cuando la semana pasada vinieron y me dijeron que me iban a ayudar a construir mi casa pensé que era mentira. Uno se cansa de golpear puertas. Mi hijo (Diego) tiene síndrome de down y nunca conseguimos nada para que él estuviera mejor. ¿Qué puedo decir del trabajo de estos chicos? No tengo palabras para agradecer", relató Horacio Ayer, los chicos del Salvador trabajaron en la obra medio día, y partieron hacia Buenos Aires. El año próximo, Roca los esperará nuevamente.

Copyright Río Negro Online - All rights reserved
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación