Un plaguicida generaba el mal olor en el baldío

Se especulaba con que un cadáver podría haberlo causado.

Presentarán una denuncia penal por contaminación grave en el lugar.

NEUQUEN (A

En el lote se buscaron indicios de Sergio Avalos, el universitario desapareci-do.

N).- Al final un producto agrícola altamente tóxico para humanos y animales despedía el fuerte olor pestilente en el terreno donde se especuló podía estar oculto el cuerpo del estudiante Sergio Avalos.

Este baldío se encuentra a apenas a unos 1.000 metros de la discoteca El Fuerte (ex Las Palmas) donde fue visto por última vez el joven de 18 años.

Las autoridades se disponen a realizar la denuncia penal por contaminación grave y a informar a la policía la novedad. Además, en el transcurso de la semana realizará los trabajos de remediación ambiental en el lugar.

El misterio fue develado por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) mediante análisis de laboratorio de muestras de la tierra, por encargo del municipio. La sustancia hallada es metamidofos, un órgano fosforado de venta permitida que se usa como insecticida y acaricida en los cultivos.

Su utilización está expresamente prohibida en los frutales de pepita y carozo hasta el fin de la floración.

La concentración del plaguicida en el terreno es pura o en muy alta concentración, arroja el resultado del INTI. El vaho a podrido que alarmó tanto a la vecindad de Mariano Moreno se debe a la presencia de azufre y nitrógeno. Y fue lo que en un primer momento hizo presumir a los efectivos de la policía y a los bomberos la posibilidad de que allí estuviese enterrado el cuerpo del estudiante de Economía, desaparecido el 15 de junio.

Durante la investigación en el lugar, entre el 15 y el 19 de agosto, las retroexcavadoras no encontraron nada y la policía ni los bomberos ni los técnicos pudieron descifrar el misterioso olor. Al aspecto negativo de la contaminación, el subsecretario de Gestión Ambiental Carlos Roca agradece la buena fortuna de que se trate de un plaguicida biodegradable, de rápida degradación y de tiempo de carencia limitado. Pero advierte que puede ocasionar efectos sobre la salud en contacto directo con la sustancia o por inhalación de los polvos tóxicos.

El funcionario no se explica el acto "inmoral e irresponsable" del derrame, que cree "intencional", porque "comunicándose con el municipio o con el INTA, se podrían haber adoptado las medidas adecuadas de manejo sin cargo para la persona que almacena plaguicidas".

"Este caso sigue estando dentro de la órbita policial, ahora hay que investigar quién arrojó la sustancia", está persuadido Roca. El INTI comunicó por teléfono el resultado a las autoridades para que actúen en tanto remite la nota oficial del estudio.

Consumado el desastre ecológico, Roca anticipa que se procederá a cercar el área del derrame y a retirar la sustancia con un absorbente -arcilla, arena o tierra vegetal-. Estos desechos y la tierra van a ser cargados en un contenedor y serán transportados al centro de disposición final ubicado en la playa de curado de las piletas de oxidación en la barda.

El terreno objeto de estos menesteres se encuentra en la calle Pellagatti al 300, a unos 100 metros de la ruta nacional 22 y a unas 10 cuadras de Las Palmas, en el barrio Mariano Moreno.

Además del despliegue cinematográfico de efectivos mientras duró la búsqueda en el predio, participó un perro especialmente entrenado por la policía pampeana y un equipo con geo radar. En este lapso fue continua la presencia de Asunción Avalos, padre del universitario, y eventuales las del ministro político Oscar Gutiérrez y el titular de Obras y Servicios Públicos, Ricardo Esteves.

Veintisiete días después de este hecho se supo el motivo del olor, de la suerte del joven no se sabe nada a casi tres meses de su desaparición, aún aunque todos la suponen.