Cada día un nuevo bache en las calles neuquinas

Los organismos de servicios públicos contribuyen al deterioro del asfalto. El EPAS y Camuzzi, los más cuestionados

NEUQUEN (AN).- En un año y medio Neuquén podría lucir calles impecables si nada ni nadie rompiera el asfalto de hoy en más. Pero esta máxima choca con la realidad: todos los días aparece un bache nuevo.

Los organismos de servicios públicos contribuyen a dejar la calzada como un queso gruyere. El Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) taladra el asfalto a razón de 300 metros cuadrados por mes, y detrás suyo invariablemente desembarca la cuadrilla municipal dispuesta a emparchar.

En tanto, Camuzzi Gas del Sur rompe y emparcha por su cuenta.

La imprevisión, las conexiones ilegales y la pérdida de la vida útil del hormigón y del asfalto refuerzan este escenario poco alentador, que ha catapultado a los neuquinos como eximios conductores esquiva-pozos.

La capacidad máxima operativa de la municipalidad cubre la reparación mensual de 1.200 metros cuadrados de baches, disgregados en 1.000 metros cuadrados de asfalto y en 200 metros cuadrados d hormigón. Un equipo de 21 operarios organizado en cuadrillas se mueve tipo "comando" para concluir la obra en el menor lapso de tiempo y abrir las calles al tránsito lo antes posible.

Sin embargo, este esfuerzo no alcanza. El EPAS rompe un promedio mensual de 300 metros cuadrados de calzada y como el municipio tiene que subsanar lo roto, se ve obligado a desplazar tareas programadas en otros lugares de la ciudad, dice el subsecretario de Servicios Públicos Carlos Yañez.

Yañez aclara que al municipio y al EPAS los liga un antiguo convenio que obliga a la comuna a efectuar las reparaciones con costo al organismo provincial.

"Priorizar qué y dónde se vuelve sumamente dificultoso en una ciudad donde las roturas en la calzada son una constante", se lamenta.

Explica que una rotura no prevista en una calle principal desplaza la reparación de una programada en un barrio Esta situación ha sucedido tantas veces que el funcionario confiesa que perdió la cuenta de las veces que hubo que alterar el cronograma de los trabajos.

Además, la filtración o pérdida de agua de las cañerías hunden el asfalto por socavamiento del terreno. Los barrios Alta Barda y Salud Pública son un ejemplo genuino de las consecuencias negativas que pueden ocurrir cuando la pérdida, por mínima que sea, es continua durante un lapso de tiempo considerable.

Yañez comenta que en Alta Barda las cuadrillas asfaltaron hasta "dos veces" el mismo sector en el mismo año, debido a que por la pérdida de agua el mismo lugar fue abierto, emparchado y vuelto a abrir. De hecho, a agosto pasado, la comuna reparó 467 metros cuadrados de carpeta asfáltica en este barrio.

Pese a su juventud, también el plan de 400 cuadras pavimentadas ya presenta los signos de reparaciones a causa de "conexiones efectuadas a posteriori" y eso que, agrega el funcionario, el municipio reemplazó cañerías y construyó redes cloacales y desagües pluviales para evitar este tipo de situaciones.

Un aliciente para Yañez: pasadas las elecciones en Neuquén, el EPAS y el municipio avanzarán en un nuevo acuerdo que promete cerrar con la constitución de una cuadrilla dedicada únicamente a reparar los trabajos que emprenda la entidad provincial.