Jóvenes cipoleños ayudaron a abuelos carenciados

CIPOLLETTI (AC).- Con la coordinación del hogar Ruca Hueché -que opera en la contención de menores en situación de riesgo- se planteó en esta ciudad una actividad en la que jóvenes de entre 13 y 18 años realizaron tareas de mantenimiento en hogares de abuelos carenciados.

Este programa ha sido aprobado por el Ministerio de Justicia de la Nación e incluso la intervención del funcionario Mariano Sciafardini, permitió la ampliación del cupo de miembros que trabajaron en casas de abuelos y en otras iniciativas. Eran 8 y se pasó a 18 participantes.

Las actividades estuvieron bajo la jurisdicción de Norma Lemos, del Ruca Hueché, y se caracterizó por un fuerte componente de inserción en la comunidad.

De acuerdo con la información proporcionada por el secretario de Acción Social, Luis Bardeggia, hace algunos meses se capacitó a los jóvenes en instalaciones domiciliarias eléctricas con el horizonte puesto en que obtengan nociones de un oficio que les posibilite una salida laboral, o simplemente para que no malgasten su tiempo.

Sin embargo, asumiendo que en la práctica son escasas las posibilidades de inserción laboral se buscó una alternativa inmediata en el tema de las refacciones en casas de abuelos.

Sin embargo, paralelamente se continuó con las capacitaciones en distintos barrios periféricos de la ciudad y los chicos mantienen una huerta en el patio del Ruca Hueché y un taller de cerámica.

Unos 30 asisten dos veces por semana a una capacitación de seis horas. "Lo que hacemos es tratar de no paralizarnos ante la crisis y agudizar el ingenio para brindar contención a adolescentes en situación de riesgo", consignó Bardeggia.

Dijo además que en líneas generales los chicos y jóvenes vienen trabajando con la comuna desde hace varios años en el programa, y corresponden a los barrios Quito, Anai Mapu y 1200 Viviendas.

La continuidad del trabajo -que incluyeron las refacciones de casas de abuelos- se da a partir de reuniones grupales en las que unos 45 jóvenes trabajan sus problemáticas desde la expresión literaria, artesanal y oral.

En este aspecto y dado que franjas juveniles son las que tienen mayores problemas con la policía, se organizó también un taller de ética y derechos humanos donde los adolescentes pudieron dialogar con autoridades policiales quienes respondieron a las inquietudes de sus interlocutores.

También se planificaron talleres de "Educación para el ejercicio de una sexualidad responsable", en establecimientos primarios y secundarios.

Se dijo en el Ruca Hueché que la experiencia de las actividades en viviendas de abuelos solos, de muy poca solvencia económica, ha resultado "positiva" y que se continuará en el futuro ampliando el cupo de chicos y jóvenes afectados a esta iniciativa.